Algo ha sobrevivido… otra vez.
Jurassic Park parecía llegar a su fin con el estreno de Jurassic World: Dominio, sexta entrega de la franquicia y cierre de la segunda trilogía que, como tal, cerró todos los cabos sueltos de la historia hasta ahora. ¿O tal vez no? Recapitulemos: la victoria de nuestros héroes, la caída de Biosin e incluso el destino de la tercia protagonista estelar. Pero no nos olvidemos de lo más importante: los dinosaurios.
Algo ha sobrevivido. Sí, otra vez. No sólo en islas, sino en territorio continental de todo el mundo, lo que ha provocado que la interacción entre estas criaturas y humanos se intensifique. No fue un hueco del guion, sino una decisión completamente deliberada que apunta a nuevas entregas. Así lo confirmó el mismísimo director Colin Trevorrow:
“Específicamente hice algo diferente a las otras películas para cambiar el ADN de la franquicia”, explica para Empire.
“Las cinco películas anteriores son tramas sobre dinosaurios. Ésta es una historia sobre personajes en un mundo en el que conviven con dinosaurios. Para que la franquicia pueda seguir adelante, porque es intrínsecamente no franquiciable, probablemente sólo debería haber un Jurassic Park, pero si vamos a hacerlo, ¿cómo puedo permitirles contar historias en un mundo en el que existen los dinosaurios? a diferencia de, ¿aquí hay otra razón por la que vamos a una isla?”.
Ahora lo que muchos se preguntan: ¿fue sólo una posibilidad por si alguien desea retomar la historia? “Hay más por venir”.
Las opciones no se limitan a los dinosaurios, sino que también incluyen a los personajes humanos. Los regresos de Owen y Claire son improbables, esta es la razón por la que Dominio “claramente tiene un interés real en la creación de nuevos personajes a los que se aferrará una nueva generación: Kayla Watts (DeWanda Wise) y el personaje de Mamoudou Athie, Ramsay Cole. Y el personaje de Dichen Lachman (Soyona Santos), que acaba siendo arrestado al final”.
En otras palabras, parece que tendremos aventuras prehistóricas por un buen rato. ¿Pero cuándo? Eso no lo sabemos, pero confiamos en que no tendremos que esperar otros 65 millones de años para el reencuentro.
