La película española Alcarràs, de la directora Carla Simón, finalmente llegará a México, a casi un año de haber ganador el Oso de Oro de Berlín en 2022.
En febrero del año pasado, la película Alcarràs, de la directora Carla Simón, se alzó con el Oso de Oro de la 72ª edición de la Berlinale, un galardón histórico tomando en cuenta que España no lo recibía dese inicios de los 80, con La Colmena, del legendario Mario Camus. Ahora, casi un año después, finalmente llega a México.
El jurado de la Sección Oficial, dirigido por el cineasta de culto M. Night Shyamalan, destacó que la película tenía “unas extraordinarias interpretaciones, desde los niños actores a los ancianos de 80 años, además de una habilidad para mostrar con sensibilidad la lucha de la familia, y su retrato sobre la conexión y dependencia con la tierra que nos rodea”.
Alcarrás narra la historia de una familia de tres generaciones que cultiva melocotones y el choque de realidad que recibe cuando el propietario de sus terrenos les avisa que va a destinar las parcelas a un proyecto más moderno. Es ahí cuando todos inician un entrañable viaje de unión ante las adversidades.
“Desde que tienen uso de razón, la familia Solé ha pasado todos los veranos recogiendo melocotones en su huerto de Alcarràs, un pequeño pueblo de España. Pero la cosecha de este año podría ser la última, ya que se enfrentan al desalojo”, se explica más a detalle en la sinopsis oficial de la película.
“Los nuevos planes para el terreno incluyen talar los árboles e instalar paneles solares, lo que provoca una ruptura en el interior de la numerosa y muy unida familia. Por primera vez, se enfrentan a un futuro incierto y corren el riesgo de perder algo más que su hogar”.
La directora Carla Simón imprime al filme muchos tintes autobiográficos, con interpretaciones naturalistas que hacen que por momentos lo que estamos viendo se sienta más como un documental, al presentar personajes reales que lidian con problemas muy identificables para la audiencia.
“Mis tíos cultivan melocotones en Alcarràs. Y creo que la película nació cuando murió mi abuelo, un momento de reflexión para todos en el que pusimos mucho en valor su legado. Mis tíos heredaron la tierra y yo empecé a reflexionar sobre si esos árboles iban a estar ahí para siempre”, explicó la cineasta a RTVE.
“Reflexioné mucho sobre cómo ha cambiado el mundo de la agricultura, que esta manera de hacer agricultura en pequeñas familias ya no es prácticamente sostenible”.
Con un listado de actores poco conocidos o inexpertos, como Jordi Pujol Dolcet, Xènia Roset, Anna Otín y Albert Bosch, Alcarràs ha sido ovacionada desde su lanzamiento en la Berlinale, en especial por la química que tiene todo el reparto, que por momentos realmente se siente como si fuera una familia de verdad.
“Para crear un vínculo entre ellos alquilamos una casa y nos reuníamos juntos y por separado. Y a partir de eso íbamos improvisando momentos que tenían sentido para las relaciones que había en la película. Queríamos crear una especie de memoria compartida entre todos los actores y debió funcionar porque ahora siguen llamándose papá, mamá, abuelo…”, explica la realizadora.
“Ese tono naturalista que buscamos muchas directoras y directores, tiene que ver con una especie de evolución natural en la filmografía española, que siempre ha sido muy actuada y maravillosa, y ahora es normal que haya gente que busque un tono un poco más realista”.
Alcarràs era la candidata española al Óscar a Mejor Película Internacional, pero desgraciadamente no logró colarse en la lista de semifinalistas de la Academia. Sin embargo, eso no es pretexto para que te la pierdas en nuestras salas, a partir de este 5 de enero.
