Esta semana estrenó en México la cinta de terror psicológico Muerte infinita, de Brandon Cronenberg, una obra que seguro te impactará.
Cuando Brandon Cronenberg irrumpió en escena con su espeluznante debut Antiviral, su llegada fue recibida con muchísimas expectativas entre los fans del género de horror. Y no es para menos, pues su padre es el legendario cineasta David Cronenberg.
Considerado el padre del “body horror”, David es responsable de las películas más exitosas y de culto de dicho subgénero, como The Brood, La mosca, Dead Ringers, Scanners y más recientemente, Crímenes del futuro, entre otras.
Afortunadamente, desde su primer alabado cortometraje Please Speak Continuously And Describe Your Experiences As They Come To You, de apenas 10 minutos, Brandon dio de qué hablar por su particular aproximación a los temas de la psique humana.
Su primera película, Antiviral, dejó en claro la influencia de su padre a la vez que dotaba a su firma de autonomía. Ambos comparten el mismo interés por la oscuridad de la mente humana, el sexo como liberación y el factor viscoso, pegajoso y asqueroso de lo que ocurre cuando un cuerpo humano, la más débil de las máquinas, falla y se transmuta.
“Quiero decir, estamos emparentados y obviamente mi papá tuvo mucho que ver con mi educación, así que puede ser natural que haya algún tipo de in inspiración en mis películas. Pero hacer deliberadamente algo, así sea una comedia romántica, seguiría definir todavía mi carrera en términos de la suya.
“Lo único que intento con mi cine es seguir persiguiendo mis propios intereses artísticos en cada momento y dejar que los demás decidan hasta qué punto se solapan o si son interesantes, o no”, compartió Brandon Cronenberg a IndieWire.
Una filmografía retorcida
Antiviral, de 2012, nos cuenta la historia de un tipo que trabaja en una clínica que se dedica a replicar enfermedades de famosos para el consumo público. Él se obsesiona tanto con una estrella, que terminan inyectándose a sí mismo y poniendo en riesgo su vida.
Possessor, su segundo filme, de 2020, navegó por los mismos recovecos al presentar la historia de una asesina corporativa de élite que toma el control de los cuerpos de otras personas utilizando tecnología de implantes cerebrales para ejecutar a personas de alto perfil.
Lo que nos lleva a su nueva cinta, Muerte infinita, que ya puedes ver en cines de México a partir de esta semana. Infinity Pool (su nombre en inglés) ofrece a Brandon su lienzo más extenso y extremo hasta la fecha: es un festín de degradación, orgías con luz estroboscópica, horripilantes máscaras rituales y carnicería anatómicamente imaginativa.
A lo que se enfrenta uno como espectador es a una película que parece diseñada para revolver el estómago de quien la vea. Es todo lo que se podría esperar de una obra fílmica con el apellido Cronenberg en sus créditos.
¿De qué va Muerte infinita?
El filme pone casi todo su peso en las dos estrellas protagonistas, Alexander Skarsgård y Mia Goth, quienes entregan actuaciones crudas, feroces, aterradoras y exquisitas de contemplar. Ambos histriones se consolidan como amantes del género más retorcido.
Skarsgård interpreta a James Foster, un novelista mediocre que escribió un libro con malas críticas hace un par de años y con un tremendo bloqueo mental. Un hombre que se casó por dinero cuando conoció a la cariñosa y millonaria Em (Cleopatra Coleman).
Al inicio de Muerte infinita, los dos están de vacaciones en la remota isla ficticia de Li Tolqa donde el exuberante entorno de primera clase parece al mismo tiempo irreal y amenazante. Ahí conocen a Gabi (Goth) y su esposo, Alban (Jalil Lespert), con quienes deciden pasar un día de campo con consecuencias trágicas.
“Este escenario lo utilizo en gran parte para hablar de cómo la psicología humana puede mutar y la violencia animal puede resurgir en el contexto de no tener responsabilidades”, dijo Cronenberg.
“Este espejo de la realidad, casi como un Disneylandia, encerrado en la burbuja de un complejo turístico, me resulta muy extraño y grotesco. Es como si no estuvieras visitando un país. Estás visitando una dimensión alternativa al otro lado del país o una nación turística al otro lado del mundo”.
Luego de un accidente que sacude a todos, el cuarteto es detenido por el gobierno local, el cual, a cambio de una jugosa suma de dinero, les ofrece su libertad con una opción fuera de este mundo: podrán crear un clon de sí mismos para que sea ejecutado en su lugar y así salden sus pecados y faltas.
Déjate sacudir
Lo que continúa es algo para lo que no estamos preparados. Muerte infinita es una experiencia escalofriante que aborda la sensación de la falta de identidad y explora de forma torcida la disparidad entre las estructuras de clase de ricos y pobres en el mundo.
“Creo que el shock por el shock tiene un valor limitado“, afirma Cronenberg. “En mis películas, vemos a personas anodinas en un contexto anodino que, debido a la libertad de responsabilidad, empiezan a resurgir con una violencia y una carnalidad animales. Ese contraste es realmente importante para comunicar visceralmente lo que están experimentando”.
En resumen, la película, que cuenta con una calificación de 84% de “frescura” en Rotten Tomatoes, llega para sacudir mentes, revolver estómagos y solidificar el nombre de Brandon Cronenberg y Mia Goth como dos figuras importantísimas en el género de horror moderno.
Un viaje que seguro te dejará mareado, pero también reflexionando sobre quién eres y qué serías capaz de hacer por mantener intacta tu “integridad”.
