Entre la nieve, un grupo de ángeles encontró sus alas.
Películas basadas en la fe hemos visto muchas, pero pocas se atreven a mostrar personajes humanos, llenos de defectos y virtudes. Este mayo, Cinépolis trae para los espectadores una historia llena de drama y tragedia, pero también de amistad… y milagros que lo cambiaron todo. Hilary Swank y Alan Ritchson protagonizan Ángeles inesperados, película con Garantía Cinépolis que promete llevarnos a las lágrimas, justo como la emotiva historia real que la inspiró.
1990, Louisville, Kentucky. De acuerdo con el Louisville Courier Journal, Ed Schmitt tenía la dura misión de criar a Michelle y Ashley, dos niñas pequeñas. Este se encontraba de luto, pues recientemente había quedado viudo y no sabía qué hacer con sus pequeñas. Ambas sufrían de una enfermedad congénita por la cual necesitaban trasplantes. De lo contrario, sufrirían el mismo destino que su madre.
Afortunadamente, Ashley recibió el trasplante en 1991, pero eso no acabó con los problemas de la familia. Para 1994, Michelle todavía necesitaba el procedimiento, la lista de espera para recibir la ayuda de un donante no avanzaba con la velocidad que todas esperaban. Al mismo tiempo, las deudas de Ed eran cada vez más grandes. Los periódicos locales difundieron la noticia en aras de conseguir ayuda para los Schmitt, pero el esfuerzo parecía en vano.
Un día, Sharon Stevens, estilista de la zona, leyó una de las notas dedicadas a la familia. Debido a su buen corazón, la mujer inició una campaña de recolección de fondos para ayudarlas. Sus esfuerzos llegaron hasta a pedir informes de cuánto costaba rentar un avión para que Michelle fuera transportada a un hospital cuando el órgano necesario estuviera disponible.
En enero de 1994, la noticia llegó: un donador estaba listo para cambiarle la vida a Michelle. ¿El problema? Una tremenda tormenta de nieve había caído sobre Louisville, y todos los caminos, incluyendo el que iba al aeropuerto, estaban cerrados. El tiempo corría; si Michelle no llegaba al hospital esa misma tarde, el trasplante ya no sería viable.
De inmediato, Ed, la abuela de las niñas, y la misma Sharon se pusieron a pensar en miles de ideas. Una iglesia de la zona podía recibir al helicóptero en su estacionamiento, pero necesitaban liberarlo de nieve para realizar el aterrizaje. Miembros de la comunidad, y fieles religiosos de la iglesia, llegaron con palas para quitar la nieve. El momento conmovió a todos los involucrados, e incluso llegó a la televisión y los periódicos. Louisville, de un momento a otro, se llenó de ángeles inesperados.
Michelle Smith murió en 2021 por un aneurisma abdominal. Sin embargo, pudo hacer una vida “normal” hasta que llegó su momento de partir. Trabajó en el campo médico para ayudar a más niños que, como ella, necesitan de esos ángeles para seguir construyendo un destino. Laboró junto a pediatras y algunas instituciones para devolver a la comunidad la oportunidad que ella recibió.
Sharon, la estilista de los milagros, se mantuvo cercana a la familia durante varios años. En 2023 publicó un libro con sus memorias de aquellos tiempos, también bajo el título Ángeles inesperados. Durante la premiere de la película, en febrero de 2024, Ed y Michelle posaron para los medios. De igual manera, el pasado diciembre, Michelle compartió en sus redes sociales un conmovedor mensaje en honor a lo que hubiera sido su cumpleaños 33.
“Feliz cumpleaños 33, Chelle. Te extraño todos los días y desearía que aún estuvieras aquí. Perderte fue la cosa más difícil que jamás he enfrentado. Y daría todo por tenerte de vuelta. Tu nombre y legado vivirán. Aquí, en menos de 3 meses, todos sabrán quién fue Michelle Schmitt. Agradezco que tu memoria pueda llevarse de esta forma a través de la película”.
Si quieren conocer a los Ángeles inesperados que combatieron la nieve, la película llegará a las salas de Cinépolis el 30 de mayo.
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