Gracias al séptimo arte, éstas maravillosas historias llegaron a un gran público.
La historia del cine no sería lo mismo sin aquellas películas inspiradas en novelas. Algunas veces, los mundos y personajes escritos en páginas de un libro son tan impresionantes que necesitan llegar a otros medios. Y el cine es perfecto para ello. Aunque al hablar de adaptaciones de novelas al cine es común pensar en clásicos hollywoodenses, también hay historias mexicanas que dieron material suficiente para convertirse en películas. A continuación, te presentamos nuestra selección con algunas de las más importantes
Santa (Dir. Antonio Moreno, 1932)
Basada en: Santa, de Federico Gamboa (1903)
Con ésta película protagonizada por Lupita Tovar y Carlos Orellana, el cine sonoro hizo su debut en México. Narra la historia de Santa, una humilde muchacha de una belleza inusual que vive feliz con su familia en Chimalistac, un pequeño poblado al sur y a las afueras de la ciudad de México. Su gran belleza hace que los hombres se fijen en ella, y así ocurre con Marcelino, un soldado que la seduce y después la abandona. Tras ello, la joven sufrirá la pena de ser expulsada de su hogar por sus ofendidos hermanos y condenada a la prostitución.
Se trata de una historia fuerte que, hasta nuestros días, se considera un clásico por la forma en que muestra a su protagonista. Para un entorno en que los personajes femeninos solían tener rasgos positivos, Santa fue todo un parteaguas. La novela de Federico Gamboa también se adaptó en 1918, 1943 y 1969, pero podríamos decir que ésta es su versión más interesante.
Los de abajo (Dir. Servando González, 1976)
Basada en: Los de abajo, de Mariano Azuela (1916)
La película narra la historia del campesino Demetrio Macías y sus cómplices durante la Revolución Mexicana. Tras ser asaltado, reúne a 25 forajidos con los que, tiempo después, participa en la Revolución. Al igual que Santa, la historia de Mariano Azuela cuenta con varias adaptaciones, pero ésta es la más sobresaliente gracias a su elenco y la forma en que logra trasladar el mensaje de la novela original.
Mariana, Mariana (Dir. Alberto Isaac, 1987)
Basada en: Las batallas en el desierto, de José Emilio Pacheco (1981)
Debido a la muerte de su padre, Carlos regresa a la ciudad de México para asistir al entierro; en el panteón, se reencuentra con Rosales, un amigo de la infancia con el que comienza a recordar los años de escuela. Así, el hombre se remite a la época en que su familia se mudó de Guadalajara a la colonia Roma, para buscar una mejor estabilidad económica. Ambientada en dos épocas y con argumentos poderosos, la adaptación de la obra de José Emilio Pacheco resulta efectiva por diversos aspectos. No sólo es inteligente, sino también toca temas importantes como la dinámica familiar, los prejuicios, las diferencias de clases y la forma en que algunas personas tratan a los extranjeros.
El gallo de oro (Dir. Roberto Gavaldón, 1964)
Basada en: El gallo de oro, de Juan Rulfo (1958)
Tras la muerte de su madre, Dionisio, un pobre pregonero, ve cómo le cambia la suerte gracias a un gallo que le regalan luego de resultar lastimado en una pelea. Tras un tiempo de cariños y cuidados, Dionisio hace que el gallo se recupere y vuelva a las peleas siendo “el gallo de oro”. Al mismo tiempo, Dionisio se enamora de una mujer prohibida: “La Caponera”. Con las actuaciones de Ignacio López Tarso y Lucha Villa, ésta película se convirtió en un clásico no sólo por el viaje de su protagonista, sino también por contar una típica historia de amor que conquistó a muchos espectadores. A lo largo de las décadas, El gallo de oro fue adaptada nuevamente para cine en 1986.
Como agua para chocolate (Dir. Alfonso Arau, 1992)
Basada en: Como agua para chocolate, de Laura Esquivel (1989)
Tita y Pedro son dos jóvenes perdidamente enamorados que se ven obligados a renunciar a sus planes de futuro. La madre de Tita decide que, al ser ésta su hija más joven, es la que debe encargarse de sus cuidados. Para ello, debe permanecer soltera y no tener más obligaciones que las de quedarse con su madre y acompañarla durante su vejez.
Tras varias décadas, podríamos decir que ésta película se ha convertido casi en un clásico del cine mexicano. Su historia es romántica a más no poder, pero también tiene frases y momentos que son recordados a varios años de su estreno. Para muchos, gran parte del encanto es el romance de sus protagonistas, uno como los que ya casi no se ven en las pantallas. Si la película fue todo un éxito, en parte también se debe a la novela original, que se convirtió en un suceso para la literatura latinoamericana y una gran representante del realismo mágico.
Arráncame la vida (Dir. Roberto Sneider, 2008)
Basada en: Arráncame la vida, de Ángeles Mastretta (1985)
En Puebla, Catalina lleva una vida digna de una jovencita de familia. Pero en cuanto conoce al caudillo Andrés Ascencio su vida da un giro impresionante. Ella deja de lado la inocencia y la ternura porque despierta a una vida de pasiones, lujos e infelicidad junto a Andrés, quien pese a lo dominante y explosivo que pueda ser se empeña en demostrarle a Catalina cuanto la ama.
Público y crítica cayeron rendidos ante ésta película protagonizada por Ana Claudia Talancón. Gracias a sus extraordinarios valores de producción y la fiel adaptación al material original, fue la representante mexicana para los Oscar de 2009 como Mejor película extranjera (ahora Mejor película internacional. Fue todo un éxito de taquilla y se destacó por el arrojo de su historia y la personalidad de su protagonista.
El atentado (Dir. Jorge Fons, 2010)
Basada en: Expediente del atentado, de Álvaro Uribe (2007)
La historia cuenta los hechos del atentado perpetrado en 1897 en contra de Porfirio Díaz, entonces presidente de México. Afortunadamente, todo terminó en un acontecimiento fallido y patético, ya que el agresor, Arnulfo Arroyo, se encontraba borracho, no encontró el arma que le dieron y fue atrapado de inmediato. El texto de Álvaro Uribe fue uno muy elogiado en su momento, y por ello la adaptación de la cinta tuvo el apoyo de organizaciones como la Comisión del Bicentenario del Gobierno del Distrito Federal y el Gobierno de Zacatecas, entre otras. Contó con un presupuesto de $77 millones de pesos y figuras como José María Yazpik, Irene Azuela, Daniel Giménez Cacho y María Rojo.
Las niñas bien (Dir. Alejandra Márquez Abella, 2019)
Basada en: Las niñas bien, de Guadalupe Loaeza (1987)
La gran crisis de 1982 afecta de manera significativa a México. Sofía es una mujer de clase alta y acomodada que, junto a su grupo de amigas del club de tenis, tendrá que despedirse de sus lujosos excesos. También tendrá que guardar las apariencias ante las personas de su entorno y aprender el valor del dinero.
Aunque las andanzas de Sofía son dramáticas y podrían representar el punto de quiebre para muchas personas, lo cierto es que la dirección de la cinta logra una interesante catarsis. Gran parte del encanto de la cinta recae en Ilse Salas, quien aborda un sinfín de emociones en su rol protagónico y demuestra que puede con el drama y la comedia a partes iguales. No sigue el material de origen al pie de la letra, pero sus libertades encajan a la perfección con la historia.
El complot mongol (Dir. Sebastián del Amo, 2019)
Basada en: El complot mongol, de Rafael Bernal (1969)
En 1963, la URSS oye el rumor que China pretende asesinar al presidente de EU en su próxima visita a México. Filiberto García, un policía judicial con alma de matón, tiene 72 horas para investigar el complot mongol. Tomando como base el texto que según muchos, fundó la novela negra en México, el director Sebastián del Amo logró una película con destacados valores de producción, un guion lleno de importantes giros, y actuaciones sorprendentes en algunos actores. Si siempre vieron a Xavier López “Chabelo” como el tierno amigo de todos los niños, en ésta película lo verán como pocas veces.
Casi el paraíso (Dir. Edgar San Juan, fecha de estreno por confirmar)
Basada en: Casi el paraíso, de Luis Spota (1956)
A 67 años de su lanzamiento, la aclamada novela cobrará vida en una esperada nueva versión. Su trama sigue a Ugo Conti, un príncipe italiano que llega a México escapando de su amante y mecenas. En poco tiempo, Conti deslumbra a la sociedad mexicana de los años 50, pero también seduce a la hija de un prominente empresario mexicano para convertirla en su esposa y él formar parte del clan.
Se trata de un descarnado relato de la burguesía mexicana, y a pesar de no estar ambientada en la actualidad, tiene una historia con la que muchos se pueden identificar. La película cuenta con la dirección de Edgar San Juan, quien escribió el guion junto a Gaz Alazraki y la coboración de Kilian Kerwin. Cuenta con un elenco de lujo, formado por el italiano Andrea Arcangeli, Esmeralda Pimentel, Karol Sevilla y Miguel Rodarte. Uno de los proyectos mexicanos más esperados de los últimos años.
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