“Hay una palabra en coreano; In Yun, significa providencia o destino…”
¿Recuerdas a esa persona que en algún momento te hizo sentirlo todo, pero, por alguna razón, simplemente las cosas nunca pasaron? Un eterno clavado al “y si hubiera” es la magia de la nostalgia con la que Vidas pasadas llegó para rompernos el corazón y hacernos repensar completamente nuestra historia en el amor.
Como una de las historias más profundas, mágicas y únicas que verás en mucho tiempo, Celine Song apuntó a lo más alto para contar su propia emoción en el romance a través de un viaje intercultural que, relacionando la vida con el amor, desenvuelve un mapa completo hacia la identidad ¿qué tanto influencian en nuestra vida las personas que dejamos atrás? ¿qué pasaría si se hubieran quedado? ¿Quiénes seríamos ahora?
Inspirada en un pequeño momento de su vida, Celine Song escribió Vidas Pasadas para contar la historia de Nora Moon y Hae Sung, una dupla de mejores amigos que, por azares del destino, fueron separados de sus vidas desde que eran niños. Pero, aunque cada uno siguió el camino de su vida, por alguna razón no podían haber dejado de pensar en el otro ¿Qué es lo que pasaría si te reencuentras con ese “alguien” después de tanto tiempo? Esa es la idílica pregunta que explora esta cineasta detrás de esta historia.
Un romance del hoy
“Honesta”, “dura” y “romántica” son probablemente los mejores caracteres para describir la causalidad de la vida que esta historia de amor propone. Un viaje donde, tan simple como el flujo de la existencia, las cosas pasan y las emociones del pasado con la verdad del presente pueden conectarse sin que tú te lo esperes.
Tan bella y realista como esa sensación del “y si hubiera”, Vidas pasadas es un statement que apunta a la exploración humana y el cómo, aunque no lo parezca, existe un viaje eterno por encontrarte a ti mismo en cualquier cosa que te rodea, desde dónde vives, quién es tu pareja, cuáles son tus metas o qué fue de tu pasado.
Sintiéndose como un duelo entre la espada y la pared, esta historia lleva al máximo esa emoción de querer dejarlo todo, pero también saber lo que es la realidad y cómo, como una verdadera vida, no existe una fantasía tan genuina como en los cuentos de hadas o las romcoms perfectas.
Como una de esas voces contemporáneas del romance, la historia de Nora y Hae Song es ese relato que, para bien o para mal, nos hace pensar en que no siempre existe el “felices para siempre” o “la persona”, sino que, en un mundo lleno de tantos matices emocionales y aspiracionales, todo puede pasar. Pero ¿cómo eliges hacia dónde encausarte?
El éxito en Vidas pasadas
Vidas pasadas es una cinta única e inmediata de inmersión al suspenso y la emoción por recordar ese pasado, pero sin duda, es algo que solamente se logra a través del trabajo de Greta Lee y Teo Yoo, nuestros dos actores estelares que, desde un proceso que se siente muy artesanal, dan vida al romance de estos dos mejores amigos.
Como las guías que encausan este viaje, se siente como si Lee y Yoo hubieran decidido soltar la realidad para vivir esa burbuja sensorial que todos hemos vivido pero que no es tan tangible como parece, pero que, para el caso de Vidas pasadas, sin duda solo se puede sostener a través de su química y sensación inmediata al estar juntos. Uno de esos raros momentos en los que todo funciona con la persona indicada. Y que, al menos para esta cinta, vino como un anillo al dedo.
Entre sus proezas, además de un guion tan definido, emotivo y manipulador para contar su historia, la cinta de Celine Song llega a ser lo que es por el viaje visual que construye.
Desde una mirada bella y brillante de la vida como la tendría un niño, hasta una proeza técnica con una fotografía propositiva que sale del molde, la imagen de Vidas pasadas nos hace sentir tan en sincronía con nuestros protagonistas porque aprovecha cada momento para darnos pequeños destellos de una visión voyerista del romance. Una imagen que, como una visión multifacética, nos deja entrar desde lo más general hasta lo más profundo de este vínculo entre Nora y Hae Sung.
Un duro y real amor
Casi casi sintiéndose como una sátira de su misma existencia, Celine Song sin duda aprovechó cada momento de realismo que hay en su cinta para reconocer lo duro y complejo que es ese sentimiento de pensar en las posibilidades con una persona. Pero también lo refleja como esa unicidad tan rara que pocas veces recuerdas en la vida y, de la manera más boba, honesta y divertida, también juega con esa rareza para reconocer que, aunque estamos en un viaje de amor único, solo es algo que arde dentro de nosotros y en las mismas películas de amor.
Sin duda, Vidas pasadas es una película tan difícil de hacer como su misma sensación a explorar. Atrevida y emocional, esta es una historia que se arriesga a no compaginar con todo el mundo, pero que, si llega a hacerlo, probablemente te adentre en un viaje completamente íntimo y personal que te haga recordar aquellas emociones de tu pasado y el cómo, como un dado de azar, la vida es tan consecuencial como tú y el destino te lo permitan. Una perfecta analogía del quién soy que es encantadoramente envuelta en esa conexión intrínseca y única con esa persona que ya no es parte de ti, pero que de alguna manera siempre lo será.
Descarga la app de Cinépolis y consulta la cartelera, horarios, estrenos, preventas y promociones que tenemos para ti.
