La actriz se sinceró acerca de la pérdida de su estimado amigo.
Tomar el papel de Sam en Un lugar en silencio: Día uno fue una de las catarsis más grandes que Lupita Nyong’o tuvo en los últimos años. La actriz con ascendencia latina reveló cómo es que esta cinta de terror la ayudó a hacer las paces y superar la muerte de Chadwick Boseman.
Boseman y Nyong’o
Chadwick Boseman fue un actor, guionista y dramaturgo que marcó la industria del entretenimiento durante casi 2 décadas. Con un gran carisma y humanismo en cada proyecto y lugar en el que aparecía, el actor marcó la vida de todas las personas con las que trabajó dentro de Hollywood.
Su talento lo llevó a ser el protagonista de una de las franquicias más grandes de Marvel Studios, Black Panther, donde el artista interpretó al legendario heredero de Wakanda, T’Challa, y sobrellevó el manto del protector del vibranium; la Pantera Negra.
En esta saga fue donde conoció a Lupita Nyong’o, quien interpreta a Nakia, el interés amoroso de T’Calla en el UCM. Sin embargo, tras 4 años de interpretar al superhéroe, Boseman falleció el pasado 28 de agosto del 2020 a causa de cáncer colorrectal, dejando a toda su familia y compañeros de trabajo en luto tras su pérdida.
Ahora, a 4 años de su deceso, la estrella de Un lugar en silencio: Día uno reveló cómo fue que este nuevo proyecto la ayudó a superar la pérdida de su amigo.
El impacto de Un lugar en silencio
En una reciente entrevista para la revista People, Lupita Nyong’o se sentó para platicar acerca de su nuevo estreno en las salas de cine, Un lugar en silencio: Día uno, y reveló que es que esta experiencia en el set de Hollywood fue un gran proceso terapéutico que le permitió hacer las paces con el fallecimiento de Boseman.
Nyong’o confesó que su papel de Sam dentro de la cinta fue un reto aterrador y muy complejo de abordar al momento de adentrarse en el proyecto. Esto se debió a que su personaje estaba drásticamente definido por su ya avanzada enfermedad de cáncer terminal.
“[Fue] aterrador tener que llegar hasta ahí. [Sam] se enfrenta realmente a su mortalidad, incluso antes de que tenga lugar este apocalipsis, y cuya vida se le escapa entre los dedos”, comenzó diciendo la actriz.
De acuerdo con la ganadora del Oscar, la presión psicológica y emocional de retratar la vida de una persona con cáncer inmediatamente la hizo recordar el fallecimiento de Boseman y entender un poco más de cerca el duelo que el actor sobrellevó durante muchas semanas en las que enfrentó su enfermedad. Cabe recordar que el intérprete de T’Challa decidió pelear esta batalla solo y en ningún momento reveló a sus compañeros de set o el equipo de Marvel Studios su estado de salud.
“Al final, en realidad fue muy terapéutico porque acababa de experimentar no hace muchos años la muerte de Chadwick Boseman, que me sacudió hasta lo más profundo. Definitivamente estuve pensando mucho en eso”, comentó.
La catarsis de Nyong’o
Al parecer, para Nyong’o, interpretar a Sam cobró un sentido mucho más profundo que el de simplemente escapar de los “Ángeles de la muerte” del universo de Un lugar en silencio. El entender la perspectiva de vida desde el foco de una persona con enfermedad terminal la hizo tener una catarsis y valorar aspectos más simples y cotidianos de su día a día:
“De lo que me di cuenta es de que es muy importante que nos recuerden nuestra mortalidad, porque así vivimos la vida con un poco más de intención. Cuando pensamos que tenemos todo el tiempo del mundo, realmente podemos dar por sentada a la gente y las experiencias.”
Tras el estreno de Un lugar en silencio: Día uno, Lupita confesó que le encantó la manera en que se sobrellevó su personaje dentro de la historia y, asimismo, afirmó que se sintió muy feliz de que se le diera autonomía [a Sam] hasta el final, que se fuera por sus propios medios.”
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