Scarlett Johansson está consciente de que al inicio de su carrera Hollywood y su equipo de mánagers acostumbraban ‘sexualizarla’ en sus películas.
Scarlett Johansson, quien últimamente ha estado hablando sin pelos en la lengua sobre su relación incómoda con Hollywood a lo largo de su extensa carrera, afirmó hace unos días que su antiguo equipo de mánagers la “preparó” para asumir papeles “chica sexualizada” al comienzo de su carrera como actriz.
“Me convertí en una especie de ingenua”, reconoció la estrella de 38 años en el podcast Table for Two, de iHeartRadio, este martes. “Las chicas jóvenes que son así son realmente cosificadas, y eso es un hecho, así que creo que cualquiera que sea la ‘caja’ en la que te metan, te encamina en esta trayectoria de cómo será tu vida. Ahora, obviamente, las mujeres son más capaces de elegir su propio camino”.
Johansson dijo que cuando estaba al final de su adolescencia, comenzó a apoderarse de su propia feminidad y a coquetear con su propio “deseo y sexualidad”, lo que no necesariamente la ayudó a salir del encasillamiento en la que la colocó Hollywood.
“Creo que debido a esa trayectoria hacia la que me habían lanzado, realmente me quedé atrapada en esto (los mismos papeles sexualizados)”, reflexionó. “Me estaban preparando para ser lo que llamas este tipo de ‘bombshell’. Estaba interpretando a ‘la otra mujer’ y este objeto del deseo. De repente me encontré acorralada en ese lugar, como si no pudiera salir de él”.
Johansson dijo que rápidamente se dio cuenta de que elegir roles centrados en su apariencia tenía una vida útil corta, pero que a la larga podrían perjudicarla gravemente.
“Creo que ese tipo de papeles se queman muy rápido y luego no tienes muchas oportunidades más allá de eso, y sentí que me estaba quemando a gran velocidad”, agregó la estrella de Black Widow y Perdidos en Tokio, una de las películas más queridas de su carrera (apenas tenía 17 años), aunque también de las más complicadas para ella como actriz.
“Nuestros personajes (el de ella y Bill Murray) tienen esta relación profunda y eso fue difícil para mí… Luché con eso por diferentes razones. Y cuando salí de eso, fue como este extraño sueño febril”, recuerda Johansson, que actualmente es madre de dos hijos: Rose de 8 años, y Cosmo, de uno.