Por miedo a que le diera un infarto, Kevin Spacey fue llevado de emergencia a un hospital, justo en medio de un festival de cine.
Kevin Spacey fue trasladado de urgencia a un hospital esta semana por temor a sufrir un ataque cardíaco. Esto luego de que se le entumeciera el brazo mientras asistía al Festival Internacional de Cine de Tashkent, en Uzbekistán. La noticia la dieron varios medios, como Page Six.
El actor ganador del Óscar, de 64 años, se sometió a una resonancia magnética después del susto durante el certamen. En realidad, el histrión se sintió mal mientras visitaba el Museo Afrasiyab en la antigua ciudad de Samarcanda, en la Ruta de la Seda. Esto dijo Spacey en el festival, horas después del susto:
“Me encuentro bien. Realmente me hizo tomarme un momento y pensar en lo frágil que es la vida, para todos nosotros. Hoy he experimentado algo inesperado aquí. Estaba mirando estos extraordinarios murales en las paredes y de repente sentí que todo mi brazo izquierdo se entumecía durante unos ocho segundos”.
“Me lo quité de encima, pero inmediatamente se lo dije a la gente con la que estaba y fuimos inmediatamente al centro médico. Pasé la tarde allí haciéndome una variedad de pruebas. El personal me cuidó e incluso me hizo una resonancia magnética”.
La estrella de Sospechosos comunes, Seven, Los Ángeles al desnudo y Quiero matar a mi jefe, fue el encargado de ofrecer discurso en la ceremonia de clausura del festival, este lunes. Se temía que el actor pudiera haber sufrido un infarto, pero los médicos luego le dieron el visto bueno y le permitieron regresar a la gala.
“El señor Spacey fue llevado a un centro médico por problemas de salud. Los médicos y el personal lo trataron profesionalmente y se descubrió que no tenía ningún problema cardíaco”, aseguró una fuente cercana a Spacey. “Todo resultó ser completamente normal y agradece que no sea nada más grave”.