¡El casting gótico que pudo cambiar las adaptaciones de cómics para siempre!
Las historias en torno al casting de Batman siempre son fascinantes. No sólo aquéllas vinculadas a los repartos que se concretaron, sino también a los que quedaron inconclusos. Una de las alternativas más singulares en este sentido fue la de Bill Murray, quien estuvo cerca de interpretar al Caballero de la Noche en los 80.
Recapitulemos para los que no están familiarizados con la anécdota: Luego de la exitosísima Los cazafantasmas (1984), el director Ivan Reitman decidió que la mejor manera de continuar su carrera sería con la exploración de un personaje icónico como el murciélago. Para ello se acercó a dos viejos conocidos que estaban en su pico de popularidad, Bill Murray y Eddie Murphy como Batman y Robin respectivamente. ¿Y qué pasó después? El candidato al manto revela por qué la opción nunca se concretó.
“Hablé con Eddie Murphy del tema y Eddie quería ser Batman. Fue lo más lejos que llegó la plática. No quiero ser el Chico Maravilla de nadie. Quizás tiempo atrás, cuando era un chico, pero en los 80 ya era demasiado tarde”.
El otro problema vino del vestuario, pues Murray asegura que “el traje no me quedaría bien: a Eddie le sienta bien el púrpura, y a mí también. De verde y amarillo, parezco uno de los elfos de Santa Claus. Hubo mucha vanidad de por medio en aquel proyecto. Estaba claro que no iba a pasar”.
Las palabras de Bill Murray hacen pensar que el proyecto habría remitido directamente al encapotado de Adam West. Un clásico en toda la extensión de la palabra, pero que según muchos aficionados atentó directamente contra la mitología del héroe. Bajo esta premisa es difícil decir si el proyecto habría sido benéfico o perjudicial a largo plazo. No olvidemos que esta cancelación permitió que sólo unos años después Tim Burton tomara las riendas de la franquicia para una adaptación verdaderamente gótica que sigue siendo motivo de admiración hasta nuestros días. Un camino que eventualmente condujo a la trilogía de Christopher Nolan y más recientemente a The Batman bajo las órdenes de Matt Reeves.
Las declaraciones también dejan claro uno de los mayores temores de las viejas adaptaciones de cómics: la lucha de egos. Tan común, que muchos temían que afectara proyectos contemporáneos como The Avengers: Los Vengadores (2012) y La Liga de la Justicia (2017), lo que finalmente no sucedió y permitió una espectacular evolución del subgénero.
Sólo queda preguntar, ¿se imaginan a Bill Murray en el papel Batman? Una opción tan peculiar que es imposible no imaginar cómo hubiera sido de haberse concretado. Y mientras piensan al respecto, no olviden que The Batman está en nuestras salas. Adquieran sus boletos AQUÍ.
