El director Martin McDonagh criticó fuertemente a la cultura de la cancelación y admite que es un “lugar peligroso para los escritores”.
Martin McDonagh, director de Los espíritus de la isla, está haciendo sonar las alarmas sobre la cultura de la cancelación.
Sus dos últimas películas fueron aclamadas por la crítica y obtuvieron muchas nominaciones al Óscar. Así que conoce de primera mano cómo la opinión de algunos afecta el trabajo artístico de otros. Y es algo que realmente lo perturba.
El célebre dramaturgo irlandés, que dirigió a Collin Farrell en Los espíritus de la isla el año pasado y Tres anuncios por un crimen de 2017, ambas nominadas a Mejor película, admite que ha sido difícil producir sus obras de teatro en estos días.
Sus obras atraen a un buen segmento de la audiencia, pero sus diálogos e historias mordaces sin remordimientos no pasan la prueba del olfato con los censores del Reino Unido.
McDonagh le dijo a la BBC que algunas de sus obras ya no pueden recibir luz verde porque los teatros exigen que cambie algunos de los diálogos que ha escrito, lo que se niega a hacer.
“Querían hacer que algunas palabras fueran más apetecibles para ellos o lo que creen que es su audiencia”.
Para Martin McDonagh la cancelación en las artes es absolutamente aterradora
Martin McDonagh añadió que la cancelación hacia los escritores patrocinada por el estado “no está mejorando“, y agregó: “Parece que los gobiernos están cada vez más asustados de las voces disidentes”.
“Creo que es un momento muy aterrador”, agregó, y dijo que los nuevos escritores deberían “salir de las redes sociales, dejar de revisar Internet y salir e indignarse”.
McDonagh también atacó a los censores por su “pequeña indignación” y sugirió que los teatros en cuestión ahora son lugares “peligrosos” para los escritores. “Creo que es una buena idea escribir algo que sea peligroso o explosivo”.
Y tiene mucha razón, el arte no está destinado a abrazar o ajustarse a lo que alguien debería percibir como “aceptable“. Algunos de los mejores artistas se esfuerzan por provocar y hacerte sentir incómodo.
Los censores de hoy en día, más recientemente, han estado tratando de reescribir las obras de autores icónicos como Ian Fleming, Roald Dahl y Agatha Christie. Sin mencionar la “advertencia de activación” que se agregó al principio de la película Lo que el viento se llevó hace unos días.
Esta realidad ha hecho que muchos artistas, a través de todos los dominios artísticos de la cultura occidental, se autocensuren por temor a la reacción violenta y las críticas sociales. ¿Cómo es posible que el gran arte surja de esta mentalidad? McDonagh ve esta realidad “absolutamente aterradora”.
