Un sangriento desfile de acción con el sello de aprobación de Sam Raimi.
Por fin llega a las salas de cine Contra todos (Boy Kills World), ópera prima del realizador alemán de 43 años, Moritz Mohr. En sus palabras, se trata de un “retorcido cuento de hadas” plagado de artes marciales, sangre y venganza.
Esta cinta es producida por nada más y nada menos que Sam Raimi (responsable de clásicos como El Despertar del Diablo o Spider-Man). Cuenta la historia de Niño (Bill Skarsgård), un joven sordomudo cuya familia es asesinada cuando es pequeño, y quien es entrenado por un misterioso chamán (Yayan Ruhian) para cobrar venganza. Esto ocurre en un universo distópico (al estilo de Los Juegos del Hambre) gobernado por la perversa familia Van Der Koy.
Sin más, te dejamos cinco razones para disfrutar Contra Todos (Boy Kills World) en el cine.
Es una cinta de acción de alto calibre
Si te gustan las películas de acción como Kill Bill Vol. 1 (2003), la saga de John Wick, Nobody (2021) o Shut Em’ Up (2007), estás en el lugar correcto. Contra todos narra la historia de Niño a través de elaboradas y emocionantes secuencias de acción que, bajita la mano, le dan tres vueltas a películas de mayor presupuesto. Cada batalla está diseñada como el nivel más difícil de un videojuego y, al igual que en estos, cada jefe a derrotar es más complicado que el anterior, lo que garantiza dos horas de tensión y diversión.
Es un baño de sangre que te mantiene al filo del asiento
Así como cada pelea es más complicada, nuestros protagonistas se van llenando de sangre hasta acabar bañados en ella. Ojo, no se trata de una cinta gore, pero sí una película que toma los excesos del género slasher y las coreografías del cine de artes marciales para construir una original historia de venganza.
Cuenta con el sello de garantía de Sam Raimi
Como productor, Sam Raimi suele apoyar a jóvenes talentos del cine de horror, quienes a su vez cargan la influencia de este mítico director en su estilo personal. Contra todos no es la excepción, ya que conjuga tres elementos básicos en el cine de Sam Raimi: sangre, entretenimiento y humor. El resultado cumple con creces.
Un estilo visual innovador
Por su estilo visual y por la historia, uno podría suponer que Contra todos está basada en una novela gráfica o un videojuego. Sin embargo, se trata de una historia original confeccionada por Moritz Mohr en la cual, precisamente, utiliza el ritmo y varios elementos de dichas formas artísticas. Prueba de ello es el narrador ya que nuestro personaje, al ser mudo, toma la voz de su videojuego favorito. Este elemento es el punto de partida de situaciones hilarantes.
Bill Skarsgård
Se sabe que Bill Skarsgård es único para interpretar personajes desquiciados, fuera de sí, como su versión de Pennywise en It (2017). En Contra todos, Bill Skarsgård es capaz de convertir a un joven traumatizado en una peligrosa máquina de matar. Es esa dualidad entre el niño herido y el guerrero indomable la que conecta con el público y vuelve a esta cinta un temprano clásico en la carrera de este prometedor actor.
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