Desde Italia nos llega una nueva película de espectros y niños de otra dimensión: Malévolo: La Habitación del Diablo. ¡No te la pierdas!
Un terror con mucho trasfondo social, como parece ser la norma en estos días, fue el punto de partida de Milena Cocozza para crear su ópera prima, la italiana Malévolo: La Habitación del Diablo (Letto Numero 6), que finalmente trae a la artista a la silla del director luego de trabajar varios años como asistente de los cineastas.
Se trata de una historia de fantasmas en toda regla que hace malabarismos entre lo sobrenatural y la actualidad femenina, como la difícil unión entre la maternidad y el trabajo. Producida por los hermanos Manetti, expertos en el género del horror en Italia, la película está protagonizada por Carolina Crescentini, Andrea Lattanzi, Pier Giorgio Bellocchio y Roberto Citran, entre otros.
“En el antiguo hospital Forlanini de Roma conocemos a Bianca (Crescentini), una doctora que, lidiando ya con las dificultades de la maternidad, se encuentra frente a una presencia inquietante vinculada a la cama número”, nos adelanta la sinopsis oficial del filme, que estrena este 8 de diciembre en México. “Esta presencia es una pesadilla sin fin, lidiando con un pasado que regresa y que no tiene la intención de irse”.
Escrita por Antonio y Marco Mainetti junto a Michelangelo La Neve, Malévolo: La Habitación del Diablo nos presenta un oscuro secreto de este tenebroso inmueble, el cual poco a poco devela su oscuro pasado como un sádico hospital psiquiátrico para niños. Para entender más este tenebrosa premisa, el portal Hotcorn habló con Milena Cocozza.
“Vengo de un aprendizaje muy largo, de más de veinte años como ayudante de dirección en los que colaboré mucho con los hermanos Manetti. A lo largo de los años he desarrollado una relación muy estrecha con ellos. Letto Numero 6 fue su idea, una película que deberían haber hecho antes, pero que dejaron de lado”, recuerda la realizadora.
“Hace como tres años me hicieron leer el primer guion de la película y me preguntaron si me interesaba realizarla como directora. Al principio fue un poco extraño porque no es una cinta que jamás hubiera pensado o escrito, y también me asustó un poco debutar con una película de terror, que muchas veces tiene su propia audiencia específica y requiere esquemas particulares”.
Esta es la cuarta película producida por los hermanos Manetti después de Love and Bullets, The End y Tutte le mie notte. El rodaje tuvo lugar durante cinco semanas en Roma, con fotografía de Francesca Amitrano, escenografía de Noemi Marchica, vestuario de Ginevra de Carolis y sonido de Lavinia Burcheri.
“Cuando leí la historia y acepté hacerla, me dije: ‘¿Qué es lo que te interesa de esta historia, Milena?’, y encontré algunos temas que quería desarrollar. A partir de ahí empezamos a trabajar con la reescritura total del libreto, y dimos en el clavo con una historia igual de relevante y sumamente escalofriante”, asegura la directora.