El live-action de La sirenita nos presenta un contraste entre el mundo del fondo del mar y el terrestre. Te contamos sobre este último.
Ya te hablamos esta semana de las grandes proezas que Disney tuvo que implementar para darle vida al océano fotorrealista de La sirenita. Ahora, queremos hablarte de cómo construyeron el mundo terrestre de La sirenita, ese del que Ariel está tan enamorada.
Ambientada en la década de 1830 en una isla ficticia del Caribe, La sirenita tiene una impronta visual marcada por una paleta de tonos tierra (marrones, dorados y grises) para los entornos naturales y gamas de blanco, azul y dorado para las construcciones arquitectónicas de esta isla.
En tierra, la historia transcurre en espacios tan diversos como un castillo del siglo XIX, un colorido bazar y un majestuoso barco. Todos construidos especialmente para la película en los estudios Pinewood de las afueras de Londres. La producción luego se trasladó a la isla de Cerdeña, frente a las costas de Italia, donde se filmaron las escenas de exteriores.
El castillo del Príncipe Eric es de inspiración colonial y tiene un aspecto descolorido, como si hubiera sido erosionado por el clima marítimo. En su interior es luminoso y aireado, con numerosos patios y terrazas, y plantas fuera y dentro de las estancias. Hay un enorme abanico y enormes franjas de tela blanca ligera que están colgadas sobre las aberturas del comedor que dan a la terraza.
La biblioteca de Eric, en tanto, tiene guiños a la gruta de Ariel (Halle Bailey), con las mismas formas serpenteantes y la presencia de objetos que el príncipe coleccionó en sus viajes. Aquí se desarrolla la primera conexión verdadera entre ambos personajes. Una escena que seguro enternecerá a más de uno.
El barco del Príncipe Eric en La sirenita
Otro de los espacios en los que se desenvuelve Eric (Jonah Hauer-King) es su barco, que cuenta con una tripulación de treinta marineros. “Tuvimos que construir el barco como un set físico y fue una escenografía teatral impresionante. Es algo que se ve muy raras veces en una película”, cuenta el productor ejecutivo Jeffrey Silver, en un comunicado de prensa.
El barco se construyó en un set de exteriores de Pinewood en un gigantesco tanque. De tamaño real, contó con hermosas velas, un casco de madera, cuerdas, mástiles y más elementos diseñados como si fueran del siglo XIX.
“Tiene una escala de un barco grande de comienzos del siglo XIX, pero le agregamos algunos detalles, como madera de caoba y nogal, y listones de bronce para que tuviera un aspecto más elegante. Le agregamos el color azul, que es el color característico del príncipe y su castillo, y lo hicimos aún más principesco con tallados especiales que le daban su sello personal”, describe el diseñador de producción John Myhre.
Una pantalla azul, una gigantesca plataforma hidráulica para simular los movimientos en altamar y plataformas para acomodar las cámaras también formaban parte de este impactante set de filmación. Además, el barco estaba rodeado de una serie de máquinas de viento, cañones de agua y tanques con miles de litros de agua. Estos se usaban para arrojar agua por la cubierta durante las escenas de tormenta.
En Pinewood también se dio vida al mercado del pueblo que descubre Ariel después de haber tomado las riendas del caballo y el carruaje de Eric. Está compuesto por puestos de frutas, flores, sombreros y bufandas, de canastas y tapetes, de especias y joyas, junto con animales y músicos en vivo.
Por último, se construyó en Pinewood el set de la icónica laguna donde Sebastián, Scuttle y Flounder tratan desesperadamente de hacer que Eric y Ariel se besen. Entre otros elementos, incluyó una playa, botes de verdad, una cascada y un sauce de diez metros de altura.
Cerdeña: El destino terrestre ideal para La sirenita
La sirenita incluye momentos icónicos que transcurren en la playa, como la escena en la que Ariel rescata a Eric y la emocionante secuencia del final. Para crearlos, el equipo creativo eligió las paradisiacas costas de la isla de Cerdeña. El director Rob Marshall explica:
“Era importante encontrar un lugar que transmitiera el drama épico que requiere la historia. Cerdeña lo tiene todo. Las aguas cristalinas, las impresionantes costas, los acantilados, las fortalezas, las vastas playas y los caminos rurales”.
Las locaciones de Cerdeña incluyeron Cala Moresca, un muelle de pescadores en la costa noreste, en donde se filmaron el pueblo pesquero y escenas del castillo. Rena Majore fue elegida como la playa de Ariel, donde emerge del agua y se sube a su roca.
¿Un dato extra? La roca se hizo a medida y se transportó a Cerdeña en donde se la colocó en el agua en esa locación antes de la llegada del elenco. Por último, las escenas del carruaje con Ariel y Eric se filmaron en la costa de Rena di Matteu.
Adaptando el rodaje a las variaciones climáticas, el equipo liderado por Marshall desplegó en Cerdeña grandes recursos técnicos y logísticos que requerían las escenas sobre la superficie del agua, incluyendo una grúa telescópica de 9 metros sobre un bote para filmar secuencias de los actores en el océano.
La mayor parte de la imponente fotografía aérea, en tanto, fue realizada con helicópteros y también, en menor medida, con drones para poder captar un paisaje inolvidable. Todo para crear la que, hasta ahora, según varios críticos, es la adaptación live-action más ambiciosa de Disney.
La sirenita ya está disponible en nuestras salas, así que qué esperas para deslumbrarte y ponerte a cantar “Bajo el Mar” junto a Sebastián.