Grandes historias de resiliencia y esperanza.
Aunque es muy fácil decir que “después de la tempestad viene la calma”, hay personajes que han experimentado esto en la vida real, se han visto en la disyuntiva de seguir adelante o dejarse caer. Muchos, no todos, han optado por la primera, sus casos han sido llevados al cine y se han convertido en estandartes de esperanza.
A continuación, presentamos una selección de personajes inspiradores para estas vacaciones.
Jeff Bauman en Más fuerte que el destino (2017)
Con dosis de patriotismo y sentimentalismo, esta es la segunda película que gira en torno al atentado de la maratón de Boston. La primera fue Día del Atentado (2016). El trabajo es un vehículo para el lucimiento de Jake Gyllenhaal; narra cómo un hombre común y corriente, con la única intención de regresar con su ex novia, se ve en medio de los escombros ante un atentado terrorista. Con ambas piernas amputadas, un hombre que no buscaba convertirse en un héroe, termina representando el sentir de una nación.
Luke Martin en Regreso sin Gloria (1978)
Otro de nuestros personajes inspiradores. Aunque en realidad resulta más un triángulo amoroso, el filme habla sobre las secuelas de la guerra de Vietnam y de cómo se puede seguir amando e inspirando después de una tragedia. El largometraje ganó tres premios Oscar, Mejor Actor, Mejor Guion y Mejor Actriz, el segundo para Jane Fonda en el rubro principal. Luke Martin (Jon Voight) es un soldado que vuelve a su hogar con una discapacidad, paralizado de cintura para abajo. Después de ciertos eventos se dedica a hacer todo lo posible para evitar que muchachos jóvenes sean enviados a la guerra.
En el hospital de veteranos le atiende una voluntaria llamada Sally, esposa de un militar que combate en Vietnam. El trato algo ríspido al inicio, a pesar de conocerse tiempo atrás, se torna en algo amable y conforme pasa el tiempo detona en un romance. Cuando el marido, el capitán Bob Hyde, regresa del frente. Sally se ve forzada a elegir entre su esposo y su amante. Las consecuencias son inesperadas.
Stephen y Jane Hawking en La teoría del todo (2014)
Eddie Redmayne ganó el Oscar a mejor actor por dar vida a Stephen Hawking, quien recientemente falleció a los 76 años. El largometraje se basa en el libro Travelling to Infinity: My life with Stephen, de Jane Hawking, primera esposa del astrofísico, aquí interpretada por Felicity Jones. En él se expone el cómo se conocieron y cómo Stephen salió adelante con una condición neuronal derivada de la esclerosis lateral amiotrófica. Aunque la narrativa no es propositiva, las actuaciones de los protagonistas son excelentes. Un trabajo agridulce, triste, inspirador y con cierta dosis de sentido del humor.
Christy Brown en Mi pie izquierdo (1989)
Este fue el primer Oscar como Mejor Actor para Daniel Day-Lewis, al que le seguirían dos estatuillas más en el rubro principal. Lewis conmovía en la piel del escritor y pintor irlandés Christy Brown (1932-1981), quien fue el décimo hijo de veintidós. La biopic expone la lucha y tenacidad que mostró el protagonista en medio de su parálisis cerebral. Con el apoyo de su familia, sobre todo de su madre, consiguió alcanzar todas sus metas y derribar todas las barreras que impedían su integración en la sociedad. Su historia de inclusión inspiró a más de uno.
Aron Ralston en 127 horas (2010)
Tomas vertiginosas, acompañadas de adrenalina y de coraje, bien delineadas por la dupla Danny Boyle y James Franco, es lo que esta trabajo de 93 minutos ofrece. La supervivencia se teje con nervio en la historia de Aron Ralston. Él es un intrépido montañero y escalador norteamericano que se hizo famoso porque en mayo de 2003, durante una escalada por los nada transitados cañones de Utah, sufrió una caída y quedó atrapado dentro de una profunda grieta. El título hace referencia al tiempo que estuvo inmovilizado, teniendo que tomar una decisión dramática, hoy en día es fuente de inspiración y ya avisa a dónde va a ir.
Philippe y Driss en Amigos (2011)
Arriesgado el trazo de personajes, aderezado por un sentido del humor peculiar, el resultado es cursi pero funcional, esta película fue nominada al Globo de Oro en el renglón de mejor cinta de habla no inglesa. Philippe (François Cluzet), un aristócrata millonario que se ha quedado tetrapléjico a causa de un accidente de paracaídas. Para su cuidado, termina contratando a Driss (Omar Sy), un inmigrante de un barrio marginal recién salido de la cárcel. Después de situaciones ríspidas, ambos tejen una amistad donde Vivaldi y Earth Wind & Fire comulgan en un mismo salón. Ellos son dos personajes inspiradores.
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