El actor parece ser un imán para los accidentes dentro y fuera de los sets.
Con 300, el director Zack Snyder consiguió uno de los éxitos más grandes de su carrera. Protagonizada por Gerard Butler, la cinta contó (con amplias dosis de ficción) la Batalla de las Termópilas, donde Leónidas (rey de Esparta) y sus 300 guerreros lucharon contra el ejército persa. Aunque el público elogió 300 por sus efectos visuales y secuencias de acción, Gerard Butler recientemente reveló que la filmación fue todo, menos un entorno seguro. Al final, llevar semejante enfrentamiento a la pantalla grande se complicó mucho más de lo esperado.
En entrevista para People, el actor escocés recordó cómo fue rodar el icónico título bajo la dirección de Snyder. Si bien, su carrera obtuvo nuevos bríos gracias al éxito financiero, no todo fue positivo estando en el set. Decenas de compañeros pusieron su vida en peligro para lograr que los combates cuerpo a cuerpo resultaran de la mejor manera.
“Recuerdo que todos los días llevaban a alguien al hospital”, afirmó Butler. “Estabas peleando, te dabas la vuelta, habíaun tipo ahí abajo, con una lanza que le atravesó el ojo. En otra ocasión te dabas la vuelta y había un tipo allí que acababa de caerse y se rompió el tobillo. Quiero decir, era una locura.”
Por fortuna, Gerard Butler resultó ileso tras la filmación de 300. Tras el estreno de la película pudo continuar como estrella en el cine de acción, y hasta la fecha, su interpretación de Leónidas es considerada una de las mejores en su carrera. La verdadera tragedia llegaría en Pasión por las olas, drama deportivo de 2012 donde interpretó al surfista Frosty Hesson. El actor se preparó para nadar de forma profesional, pero eso no evitó que lo golpeara una gigantesca ola.
“Pensé que (mi vida) había terminado. Me tuvieron que sacar, llevarme al hospital, sacarme, ponerme el desfibrilador. Quiero decir, fue intenso”.
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Durante la charla, en la que también estuvo presente el actor O’Shea Jackson Jr., Butler contó que ha vivido accidentes automovilísticos. Uno de los más aparatosos fue junto a Pierce Brosnan, y ocurrió tras el rodaje de 300, que ya lo había dejado bastante lastimado.
“Nos estrelló directamente contra una pared. Y se suponía que esta cosa se detendría cuando él debía frenar de golpe”, continuó el actor. “Golpeamos una pared en un tejado, una pared de 3 pies de alto, a toda velocidad, en un Range Rover. Me destrozó el cuello y ya había terminado 300. Ya estaba muy golpeado por 300”.
A la larga, otras filmaciones le provocaron hipotermia, moretones y todo tipo de golpes accidentales. También habló sobre cómo le hizo una cicatriz a Hilary Swank mientras filmaban Posdata, te amo, e incluso un posible disparo hacia Angelina Jolie: “Casi le disparo en la cara. Estaba cayendo, colgando boca abajo. Tuve que disparar un arma, pero no tenía control sobre hacia dónde iba esta cosa. Entonces estaba disparando y simplemente fallé”, relató.
Para quienes extrañan ver en pantalla grande a este héroe, está por llegar El robo perfecto: Pantera. La cinta continúa con los personajes vistos en el éxito de 2018, y tiene muy emocionado a su protagonista. Respecto al género que le ha dado fama y millones de fans, tal parece que no lo abandonará en el futuro cercano. Aunque los moretones duelen y fue extraño ver a tantos compañeros heridos, Butler afirma que el trabajo de stunts “es incríble. No lo cambiaría por nada del mundo”.
El robo perfecto: Pantera llegará a las salas de Cinépolis este 16 de enero.
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