El lenguaje de la música llega hasta el FICG.
De la mano de Bruno Bancalari, director del célebre video musical “Hasta la raíz”, de Natalia Lafourcade, llega Los hijos de la Costa, documental que habla del valor de la herencia musical en los pueblos de herencia afrodescendiente de la costa de Oaxaca y Guerrero, una zona del país donde pocas veces se posan las miradas. Los hijos de la Costa tendrá su premiere en el FICG y también formará parte de las proyecciones del FICG en Cinépolis.
Los hijos de la Costa se suma a una larga tradición de documentales mexicanos cuyo lenguaje es la música. Por un lado, están los conocidos recuentos de bandas y cantantes como Café Tacuba, Zoe, Alex Lora y El Tri , Rockdrigo o Rita Guerrero. Por otro lado, están propuestas como Al son del Beno o Un lugar llamado música que nos acercan a realidades menos conocidas, pero igual de valiosas. En esta categoría se inscribe Los hijos de la Costa.
El documental relata las vivencias de destacados músicos en su cotidianeidad. Al tiempo que interpretan canciones del género donde han ganado reconocimiento, honran y festejan su herencia africana. Si con esto no es suficiente, te presentamos su trailer y te damos cinco razones para que no te la pierdas.
Un documental nos puede enseñar –y mucho—sobre música
En el documental veremos músicos de diferentes géneros y estilos. Descubriremos que cada género tiene un sonido único. Como cuenta su director:
“Se trata de proyectos diversos, todos con un legado cultural diferente y con su propio color, textura y sabor. Su música, que tiene que ver con el mar, la playa, el calor, el puerto, pero también con el campo y el llano. Al final, el lenguaje musical habló y yo me basé en él armar el arco narrativo”.
Un documental nos reencuentra con ese México que no siempre vemos
Los documentales muchas veces están allí para retratar un estado de emergencia o una situación que requiere atención. Pero retratar lo cotidiano también los hace valiosos y significativos. Como comenta Bancalari:
“A veces basta con retratar a nuestros personajes con mucha dignidad, voltear la cámara hacia ellos, escucharlos y decirles que lo que hacen es sumamente bello. Para mí, lo más importante era poder encapsular el presente y valorar la labor de estos músicos, gente abraza la música con toda el alma”.
Un documental es un trabajo colaborativo gigantesco
“En todo documental, de cualquier tamaño, es indispensable unir fuerzas. Los hijos de la Costa, al ser un proyecto pequeño, necesitaba el voto de confianza de padrinos y madrinas”, declara Bancalari, quien comparte que empezó a desarrollar este proyecto junto con Ángel Céspedes, amigo, productor e investigador musical, y luego se uniría Paola Herrera, productora ejecutiva, quien también abrazó el proyecto:
“No todo fue de golpe; dependiendo del proceso en que estábamos se unían fuerzas. Por ejemplo, Susana Harpp, quien ha hecho mucho por Oaxaca y por la cultura, y quien actualmente está una posición de poder ayudar, nos escribió una carta de apoyo”.
Un documental puede ayudarnos a sanar una herida
El cine nos conecta con nosotros porque nos vemos reflejados en sus historias. Una comedia romántica nos hace reír; una película de Pixar nos inspira. Pero el cine también es nuestro espejo cuando atravesamos un duelo, una ruptura amorosa o una situación difícil.
Ese poder de conexión no sólo lo da la ficción. El cine documental también conecta con emociones y nos ayuda a sanar heridas. Allí está el caso de Quebranto, Tempestad, Las tres muertes de Marisela Escobedo, Te nombré en silencio, Cosas que no hacemos o Eco de la montaña, este último documental ganador de 3 premios en el FICG 2014.
En el caso de Los hijos de la Costa, la catarsis surgió desde el proceso creativo, como comenta Bancalari:
“Al momento de filmar atravesaba un duelo personal; mi papá había fallecido tres meses atrás antes. Pero al escuchar las anécdotas de los músicos, muchos habían perdido a su papá y tenían historias similares. Me sorprendió el reconocimiento hacia la figura paterna. Hablaban de su papá con amor y nostalgia, y conecté con eso”.
¡Los hijos de la Costa está en Spotify!
Si al terminar este documental te quedaste con ganas de seguir escuchando a estos músicos, hay buenas noticias: al menos la mitad tienen listas de reproducción en Spotify. Quienes están disponibles son:
- Cristino “Cuiri” García, Esteban Bernal, Esteban Martínez y Pepe Ramos, integrantes de la agrupación El Internacional Mar Azul
- La cantante afromexicanana Alejandra Roble “La Morena”
- La dupla padre e hijo de Chogo Prudente y Raí Prudente, músicos y maestros comunitarios.
- Sobre la Banda Femenil KA’UX de Santa María Tlahuitoltepec, Oaxaca, existe un podcast.
Quien aún no está en Spotify son El Mero Mero y Domingo Ayona, armonicista, danzante y líder de Los Diablos del Cerro del Indio.
Los hijos de la Costa se proyectará el domingo 9 de junio (Cineteca FICG), el lunes 10 (Cineforo) y el martes 11 (Cinépolis Centro Magno). También formará parte de las proyecciones del FICG en Cinépolis.
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