Sí, El exorcista influyó de gran manera para hacer esta película.
Agosto iniciará con una interesante opción de terror en la cartelera: Exorcismo, la nueva película de terror protagonizada por Russell Crowe. En ella, el ganador del Oscar da vida a Anthony, un actor que, tras superar problemas de drogas, inicia la filmación de una cinta. Ahí interpreta a un sacerdote que practica un exorcismo en aras de salvar el alma de una joven niña. Pero las cosas se complican cuando Anthony cambia su actitud y muestra comportamientos extraños. Exorcismo cuenta con la dirección de Joshua John Miller, quien se inspiró en una historia real, y en un clásico del género, para atemorizar a la audiencia.
Joshua es hijo de Jason Miller, uno de los actores más queridos a principios de los años 70. Se trata, además, del actor que interpretó al Padre Karras en El exorcista, un título obligado si hablamos sobre cine de terror. Dicha película se convirtió en un éxito no sólo por el miedo que generó en la audiencia, sino también por la atmósfera de misterio que rodeó su producción. Leyendas sobre acontecimientos sobrenaturales y maldiciones a los actores se volvieron famosas. Pronto terminaron por inspirar a Joshua John Miller para hacer una película bajo ese concepto: ¿Qué pasaría si, al filmar una película de posesiones, algo se quedara en el set?
Si bien, hay inspiración de aquellos relatos, Exorcismo se basa en la historia real sufrida por el director, y la relación con su padre. Luego de filmar El exorcista – y conseguir una nominación al Oscar – la industria se mostraba a la expectativa de saber qué pasaría con la carrera de Jason Miller. Este aceptó algunos proyectos que parecían importantes, pero terminaron por convertirse en un rotundo fracaso. El éxito de El exorcista, su Premio Pulitzer, e incluso el Tony que ya tenía sirvieron de muy poco. Pronto se hizo evidente que no podía vender boletos por sí mismo.
“La gente me ha preguntado: ´¿Fueron los eventos malditos en el set de El exorcista? ¿Cómo fue que esa mitología afectó a tu padre?´ Yo diría que, en realidad, la fama fue su peor maldición. Ese efecto de supernova creó una sombra de la que era casi imposible salir, y creo que eso lo persiguió profundamente”, afirma Joshua para IndieWire.
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Debido a su racha de fracasos, el intérprete de Karras cayó en el mundo de las drogas y el alcohol – justo como sucede con el personaje de Russell Crowe en Exorcismo -, algo que dañó a toda su familia. Años después, y tras entender que su padre no era una figura impoluta, sino un hombre capaz de cometer errores, el cineasta escribió Exorcismo como una forma de hacer un tributo a su progenitor. En la película abarca lo complejo que es rodar una historia de terror. Además, también se adentra en la difícil relación de un exadicto con su hija. Esta última recién le abrió las puertas para retomar su relación.
“A veces es difícil sentir empatía cuando eres hijo de un adicto. La mayoría de las veces estás enojado. Pero con el paso de los años, creces y te das cuenta de que tu padre podría ser tanto bueno como malo. Las dos cosas pueden coexistir. Esta fue una película, un intento de pintar un retrato sobre alguien que siempre me pareció profundamente torturado por los arrepentimientos y esta avalancha de malas decisiones. La mitología de la película maldita fue solo la cereza del pastel, yo estaba más interesado en la guerra psicológica que sucedía dentro de él”, agregó Miller.
Con el paso de los años, el director de Exorcismo aprendió a perdonar a su padre. Por ello, esta película es una mezcla de todo lo que lo rodeó: cine, terror, posesiones y problemas. Pero, sobre todo, la seguridad de que no existe un mal capaz de superar la voluntad.
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