Si eres fan de los thrillers basados en crímenes reales, no puedes perderte Araña sagrada, que en 2022 impactó en los cines de Cannes.
Los ciudadanos de Mashhad, Irán, se vieron envueltos inesperadamente en un escándalo en 2000 y 2001 cuando 16 trabajadoras sexuales fueron atacadas y asesinadas a lo largo de la ciudad por el llamado“asesino de arañas”. El año pasado, una película basada en estos casos y uno de los mejores thrillers en llegar a los cines en la última década, Araña sagrada, se volvió un fenómeno en Cannes.
Para el cineasta Ali Abbasi, que era un estudiante en Teherán en el momento de los asesinatos, la historia se convirtió en la base de un proyecto en el que trabajaría durante los siguientes 20 años. Esa película, Holy Spider (su nombre en inglés), desenreda los asesinatos y el hombre detrás de ellos, Saeed Hanaei.
“Creo que nunca quisimos hacer una película sobre crímenes reales”, dijo Abbasi en las notas de producción del filme. Los primeros borradores de su guión, según admite, eran más sencillos al centrarse en el asesino central, que afirmaba estar en una cruzada religiosa para “limpiar la ciudad”.
El resultado nos presenta la historia de Rahimi, una periodista de Teherán que se sumerge en los barrios más peligrosos de la ciudad de Mashhad para investigar aquella cruenta serie de asesinatos.
“Pensamos que la historia más interesante provino de preguntar: ‘¿Qué tipo de sociedad, entorno y personajes alentarían el comportamiento de este asesino? ¿Dónde florece este pensamiento?'”, reflexionó Abbasi. “Como resultado de ese proceso, el guión se transformó de una historia sobre un asesino en serie a una historia sobre una sociedad de asesinos en serie”.
“Se trata de la misoginia profundamente arraigada dentro de la sociedad iraní, que no es específicamente religiosa o política, sino cultural… En lugar de hacer otra película sobre las diferentes formas en que un hombre puede matar y mutilar a las mujeres, queremos subrayar la complejidad de la tema. Y lo que está en juego en diferentes lados, especialmente en nombre de las víctimas”.
Araña sagrada es una historia brutal y difícil de digerir
Aun así, Araña sagrada, que ha sido aclamada por críticos y público en general, no es fácil de digerir. Sus escenas se clavan en la memoria del espectador, mostrando una violencia gráfica que sacude el estómago. Eso con un realismo que, además de aterrorizar la mente, invita a una reflexión profunda sobre este tipo de casos.
El realizador coescribió el guión con Afshin Kamran Bahrami, una historia que se enfoca en la división moral y política que se encendió tras el arresto de Hanaei. Con Araña sagrada, Abbasi también se arriesga de más al desentrañar el acto político de representar los cuerpos de las mujeres en el cine iraní.
“Mi forma de abordar las escenas desafiantes, ya sean escenas violentas, emocionalmente difíciles, escenas de sexo o escenas de acrobacias, es prepararme y hacer mi tarea, pero también tratar de que filmarlas no sea un problema mayor de lo que es”, explicó a A.frame el cineasta, que vive en Dinamarca y filmó la película en Jordania, eludiendo así la censura estatal iraní.
“Definitivamente estas escenas necesitan un cierto tipo de atención y preparación, pero no quiero fomentar la idea de que porque vamos a hacer una escena de crimen, ese día en el set es ‘especial’ o algo así. Tenemos mucho cuidado cuando los filmamos, pero hay un equilibrio entre qué tan consciente debo ser sobre ciertas secuencias y qué tan consciente quiero que mis actores estén respecto a hacer algo fuera de lo común”.
Araña sagrada fue seleccionada para competir por la Palma de Oro en Cannes, donde se estrenó el 22 de mayo de 2022. Zar Amir Ebrahimi, quien da vida a Rahimi, ganó el premio a la mejor actriz. La película fue seleccionada como la entrada danesa a Mejor Película Internacional en el Óscar.
Un thriller que te hará temblar
El filme, que podrás ver en nuestras salas a partir del 27 de abril, es uno de los thrillers más fascinantes de los últimos años. Es brutal, impactante, duro, visceral y te dejará con un sabor de boca amargo. Pero también es necesario. Más cuando los feminicidios siguen siendo la noticia diaria en varias partes del mundo.
“Creo que las mejores representaciones de la violencia, por ejemplo, no son necesariamente las más brutales, exageradas o incluso las más convincentes emocionalmente. Para mí, son los que son muy torpes en cierto modo, porque hay un aspecto de la realidad en ellos que creo que es difícil de corregir”, puntualiza Abbasi en la entrevista con A.frame, revista perteneciente la Academia de Hollywood.
“Lo importante en Araña sangrienta era asegurarse de que ninguna de esas escenas se sintiera demasiado dramatizada. La violencia real es torpe. No es entretenida, y es difícil de ver. Entiendo las críticas sobre la película de que hay algunas escenas que son muy difíciles de ver. O que se detienen demasiado en la violencia de Saeed contra las mujeres. Pero, para mí, la alternativa de tener escenas en las que parece fácil matar mujeres sería mucho peor en cierto modo”.
