El director compartió su emoción acerca de la producción de la secuela.
Después de 36 años, Michael Keaton está de regreso como Beetlejuice en la secuela de Tim Burton y, aunque no lo pareciera, el fantasma volvió más vivo que nunca. Es por eso que, tras filmar la cinta, el director estadounidense confesó cómo se sintió de volver a ese mundo y, en especial, de volver a ver a Keaton en su icónico atuendo bicolor.
Beetlejuice, Beetlejuice está por llegar a las salas de cine de todo el mundo en un par de semanas. Como una historia nueva, que trae de regreso a todo el elenco original e involucra a nuevas estrellas en ascenso, como Jenna Ortega, la secuela de Burton ya generó mucha expectativa entre los amantes de las películas bizarras.
Y aunque se espera que los cinéfilos de antaño y las nuevas generaciones queden anonadadas con el regreso del fantasma, sin duda, hay alguien que quedó más impactado por que Michael Keaton volviera a su papel; Tim Burton.
¿Por qué le impactó?
En una reciente entrevista con Nerd Reactor, Tim Burton se sentó para platicar acerca de su nuevo estreno en cines y reveló parte de los detalles de su producción. Con ello, el cineasta estadounidense no pudo evitar remembrar la sensación que atravesó su cuerpo cuando volvió a estar en el set del mundo de Beetlejuice y ver al personaje nuevamente, en carne y hueso bajo la interpretación de Keaton.
De acuerdo con lo que dijo Burton, la sensación de su regreso fue “aterradora” no solo por el imponente look del actor en su caracterización, sino porque de repente se dio cuenta de que, aunque más de 3 décadas pasaron entre un filme y el otro, la interpretación de Keaton y la esencia del filme lo hicieron sentir como si el tiempo no pasó en absoluto.
“No ensayamos. No hicimos nada, ¿verdad? Así que [Michael Keaton] vino y fue realmente como… la posesión del demonio, y me siento como un túnel del tiempo. Es verdad. Fue desconcertante, fue genial, fue emocionante, pero también fue realmente perturbador”, explicó.
Entre los detalles que hicieron del filme una versión genuinamente interconectada con el clásico original, Tim aseguró que gran parte de esto tuvo que ver con la esencia y presencia de Keaton dentro del set, ya que su energía y dinamismo le dio un enfoque nuevo al proyecto.
Asimismo, el director explicó que parte de este sentimiento se relacionó con la importancia de uno usar efectos especiales y hacer la mayoría del proyecto en el aspecto artesanal, como se hizo la primera entrega:
“Inventábamos cosas todos los días, lo que es difícil de hacer cuando se trata de efectos en vivo. Pero lo hicimos, y trabajé con la gente de efectos que, en el espíritu de la película, haría estas cosas muy rápidamente. Michael y yo hablamos de esto desde el principio. Eso era muy importante para el espíritu, especialmente con toda la tecnología, podemos hacer todas estas cosas, lo que sea, sólo queríamos no pensar en una secuela o algo así, sino simplemente ir y hacer la película. Así que, como has dicho, la energía que aportó fue increíble y crucial.”
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