David Koepp, guionista de la cinta, revela cómo se llegó a ese gran momento.
Nadie como Steven Soderbergh para mezclar tensión, personajes complejos y una realización muy original. Si quedaste en shock con los últimos minutos de Presencia, aquí te presentamos el final explicado.
Como sucede con las buenas historias de horror, el miedo no sólo recae en los sonidos o los efectos visuales, sino en aquellas situaciones con las que nos podemos identificar. En Presencia no hay posesiones, contorsiones o toda la parafernalia que acompaña a este tipo de títulos, sino una sensación de peligro que acecha a una familia tan común como cualquier otra. Una familia que incluso podría ser la tuya.
La historia comienza cuando Rebekah, su esposo (Chris), y los dos hijos de estos (Chloe y Tyler) se mudan a un nuevo hogar. Chloe recientemente perdió a Nadia, una de sus mejores amigas, quien pereció por una sobredosis de drogas. Todo parece ir normal, pero la joven rápidamente descubre que hay una presencia en la casa. Es justo ese espíritu quien nos muestra toda la película desde su perspectiva. Lo que vemos en pantalla es exactamente lo que puede ver la presencia.
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En un inicio, sólo Chloe detecta a este ser, pero con el paso de los minutos todos en la familia se sienten atacados. Pronto llaman a Lisa, una médium, quien les da una pista importante para entender el desenlace: los fantasmas, como la entidad que está en la casa, no tienen conocimiento de quién son, por qué se manifiestan, y tampoco entienden en qué periodo temporal están. El presente, el pasado y el futuro fluyen como uno sólo e incluso pueden converger.
La experta en lo paranormal advierte a la familia que la presencia está ahí no por algo del pasado, sino por un evento que pronto sucederá. No todos creen en las palabras de Lisa, y el ente continúa manifestándose. De hecho, se muestra protector con Chloe, a quien evita tomar una bebida adulterada por Ryan, su novio, y quien resulta amigo de Tyler.
Todo se complica cuando Rebekah y Chris parten un fin de semana para arreglar unos asuntos legales, así que Chloe y Tyler se quedan solos en casa. Al hogar llega Ryan, quien tiene como plan abusar de su novia. Mientras ella está en su habitación, Ryan pone algunas sustancias en la bebida de Tyler y lo deja inconsciente en la sala. Luego sube a la recámara de Chloe, a quien también le da una bebida adulterada para dormirla. Mientras ella pierde el sentido, él pone un plástico en su rostro e intenta abusar de ella. Al mismo tiempo, confiesa que Nadia no perdió la vida por una sobredosis, sino que él la ultimó de la misma forma en que piensa hacerlo con ella.
La presencia intenta alejar a Ryan de Chloe, pero es imposible. Entonces baja a la sala y despierta a Tyler, quien de inmediato sospecha que algo anda mal y corre a la habitación de su hermana. Al encontrarse con el intento de abuso, se lanza sobre Ryan y ambos caen por la ventana. Su muerte es instantánea. Tiempo después, la familia decide partir a otro hogar; mientras Chloe y su padre alistan su vehículo, Rebekah se queda dentro de la casa y empieza a sentir al fantasma. Cuando observa por el espejo de la sala, descubre que la presencia siempre fue Tyler. “Volvió para salvarla”, grita con desesperación mientras la pantalla se va a negros.
En pocas palabras, el final de Presencia nos revela que Tyler debía morir para resurgir como fantasma y evitar que su hermana sufriera un destino trágico. Así lo explica David Koepp, el guionista de la película.
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“La presencia está ahí para ayudarlos, no para hacerles daño. Está ahí para salvar a su hermana. Tengo esta teoría de que cada vez que creas una nueva historia de fantasmas, tienes que encontrar una razón por la que la gente puede ver fantasmas. Una de esas formas es a través del trauma”, contó a Variety.
Si bien, no todos creyeron en sus palabras, Lisa tuvo razón sobre todo lo que vio en su visita a la casa. Ese evento futuro provocó al fantasma y este se encuentra atrapado en el pasado, con una misión clara. Durante gran parte de la cinta se juega con la ilusión de que la presencia podría ser Nadia, pero el mismo Koepp afirma que se manejó así para distraer a la audiencia. Él siempre supo cómo se daría y quiénes protagonizarían el giro final de la película, lo cual facilitó su escritura y le permitió dar más credibilidad a la misma.
“Me sorprende que algunas personas no lo entiendan (el final). Siento que es clarísimo. Incluso fue un poco más claro en un momento. Tenía una pista más en la trama y Steven (Soderbergh, el director) la cortó porque es su historia. Tyler es el fantasma, por eso no quiere ver a su hermana teniendo relaciones, y cuando habla de esa horrible broma que hizo en la escuela, la presencia sube las escaleras y destroza la habitación de Tyler porque se odia a sí mismo. Todo eso tenía sentido para mí mientras lo hacía”, dijo a The Wrap.
¿Satisfechos con este impactante giro final? ¿Adivinaron quién era el fantasma antes de que la película lo revelara?
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