La actriz también revela si se arrepiente de arriesgar la vida.
Después de 9 años, este noviembre volveremos a encontrarnos con Los Cuatro Jinetes. Vistos por primera vez en 2013, este grupo de magos protagonizó con gran éxito Los ilusionistas, y dio pie a una franquicia muy querida por la audiencia. Más allá de los actos que harán en Los ilusionistas 3 y los nuevos actores en el elenco, hay algo que tiene muy emocionados a los fans: el regreso de Isla Fisher como Henley Reeves. Sin embargo, pocos saben que la primera película estuvo a punto de acabar con la vida de la actriz.
Isla Fisher y el tanque siniestro
Si recuerdan, Los ilusionistas comienza con una secuencia donde se nos presenta a cada uno de los Jinetes y sus habilidades. Cuando llega el turno de Henley, esta se encuentra encerrada y amarrada en un tanque lleno de agua al que agregan pirañas. La maga debe escapar en poco tiempo, pues de lo contrario, será devorada por las criaturas.
El momento se vuelve tenso, pues Henley tarda en encontrar la forma de salir y, aparentemente, el agua se llena de sangre mientras ella pide ayuda. Por suerte, esto último es una trampa de Henley, quien sí logró la hazaña y está del otro lado.
En 2013, durante la gira promocional de la película, así contó Isla Fisher su experiencia:
“Tuve un momento cercano a la muerte. Estaba en ese tanque de agua donde mi personaje se encuentra sumergido. De repente le caen las pirañas, y para lograrlo filmamos durante tres días y medio. Aunque en las esposas tenía una cosa magnética que ayudaba a soltarme rápidamente, la cadena que estaba entre mis tobillos y muñecas no se podía soltar tan fácil y se atoró. Estaba atrapada y muy asustada. Golpeaba el tanque y decía: ‘¡Suéltenme!’ pero todos creían que se trataba de una actuación fabulosa. Pensaron que era Meryl Streep en el tanque, pero en realidad me estaba ahogando”.
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Debido a la intensidad y el realismo, la escena se mantuvo en el corte final de Los ilusionistas, algo con lo que Isla Fisher estuvo de acuerdo. La actriz confesó que su único pensamiento en ese momento fue ella misma, mientras le practicaban la autopsia, pero con el traje de baño y las zapatillas que traía puestos.
La maniobra que la salvó
Fisher pudo salir cuando el coordinador de stunts en el set se dio cuenta de que sus pies estaban atorados. Realizó una maniobra de emergencia para que el tanque se vaciara y la actriz no muriera ahogada. Tal vez el momento no sea el más espectacular o vistoso en pantalla, pero sí es el más recordado por el elenco.
“No pude alcanzar el botón de seguridad, y tampoco hacer la maniobra que habría drenado los litros de agua del tanque en 70 segundos. Tenían a un tipo que estaba fuera de cámara, pero estaba muy lejos con una lata de oxígeno… cuando me di cuenta de que no podía levantarme y le hice señas, me di cuenta de que me había quedado sin aire”, añadió en un comentario para Rotten Tomatoes.
En retrospectiva, la actriz comenta que incluso el director Louis Leterrier se mostró sorprendido cuando ella comentó sus deseos de hacer la secuencia por sí misma. No obstante, el arrepentimiento no existe y ella sigue comprometida a realizar sus secuencias de acción cuando sea seguro.
Tras ausentarse de Los ilusionistas 2 por su embarazo, Isla Fisher promete que la tercera película será aún más grande, pues contó que no sólo hubo filmaciones en territorios como Budapest y Abu Dabi, sino también más magia, trucos y secuencias de acción.
¿Emocionados por el regreso de Isla Fisher a la saga? Los ilusionistas 3 llegará a las salas de Cinépolis este noviembre.
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