Si ya viste la película, ¿crees que las modificaciones realmente mejoraron la película?
Tras años de espera y una larga controversia por sus posibles diferencias, el live-action de Blanca Nieves por fin está en los cines! ¿En verdad es tan diferente al clásico animado de 1937?
Fue en 2016 cuando se confirmó que Disney estaba en proceso de adaptar Blanca Nieves para una nueva generación. Si bien, la elección de Rachel Zegler como protagonista generó todo tipo de dudas en la audiencia, también hubo miedo por los posibles cambios que se podían hacer a la historia. Ahora que por fin pudimos despejar las dudas, es momento de recapitular todos los añadidos y elementos que difieren entre la cinta de Marc Webb y la historia que marcó a múltiples generaciones.
Un nuevo origen para Blanca Nieves
Desde hace meses, Rachel Zegler había confirmado que el nombre “ Blanca Nieves” tendría un nuevo punto de partida. En los primeros minutos de la cinta vemos cómo sus padres sobreviven a una tormenta de nieve, durante la cual nace su querida princesa. En honor a su valentía, la fuerza que mostró y la resiliencia que marcó su nacimiento, los reyes deciden nombrar a la pequeña Blanca Nieves. Cabe mencionar que este no es un cambio específicamente para la película, pues en una de las tantas versiones del cuento se manejó el mismo origen.
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Jonathan NO es un príncipe
En 2022, Zegler se ganó el rechazo de la audiencia al mencionar sus opiniones sobre la historia de amor entre el Príncipe y Blanca Nieves. Según ella, nunco hubo un amor verdadero, y él era prácticamente un “acosador”. Cierto es que en la versión original no hay un desarrollo del romance entre ambos protagonistas, y eso es algo que cambia radicalmente en el live-action. Aquí no hay príncipe azul, sino un bandido llamado Jonathan que la conoce desde los primeros minutos. El joven logra ganarse la confianza de la protagonista, y gracias a ello sus interacciones derivan en una historia romántica miucho más creíble. Como Jonathan lucha en honor al antiguo rey (y padre de Blanca Nieves), ella siente una gran afinidad por él.
Enanos mágicos
La versión de 1937 no profundiza mucho en los enanos. Sí, los vemos cantar y trabajar en las minas, pero no sabemos mucho de su origen. En este remake, el guion de Erin Cressida Wilson añade que son criaturas de una raza fantástica y capaces de vivir durante cientos de años (al menos en esta cinta, 274). Una de las mejores escenas (al menos en lo visual) muestra a los enanos con el poder de emitir una luz y esparcirla por las rocas para así encontrar piedras preciosas. Esto facilita su trabajo en las minas y los vuelve verdaderos expertos. El trabajo de efectos visuales en ellos es, por decirlo de una manera elegante, llamativo, pero su sentido del humor añade grandes momentos a la trama.
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Blanca Nieves no sólo piensa en el amor
Si bien, Jonathan juega un rol muy importante en la cinta y sí existe el icónico beso que despierta a Blanca Nieves, ella no sólo está en busca de un hombre. Sus primeros encuentros con la Reina Malvada nos revelan que siempre se ha preocupado por el bienestar de las tierras que protegió su padre; además, tiene dudas sobre lo que pasó con este y eso la motiva a descubrir la verdad. Son su convivencia con Jonathan, la lealtad que este le demuestra y su química lo que poco a poco le hacen descubrir el amor. Para quienes ven en Blanca Nieves a una joven que sólo quiere un príncipe para ser libre, esta adaptación será una sorpresa.
Tontín no es tan… tontín
El enano más beneficiado con los cambios es Tontín. Desde su aparición en la cinta original, este personaje se convirtió en uno de los favoritos. Blanca Nieves, en su versión live-action, nos presenta a un enano igual de divertido e inocente, pero con una notoria diferencia: puede hablar. Rumbo al final de la cinta, Tontín afirma no tener miedo para enfrentar a la Reina Malvada junto a Blanca Nieves; además, se revela que, durante toda la cinta, él fue el narrador de la historia.
Los bandidos
Así como la protagonista lidera a los siete enanos, Jonathan también tiene un grupo que secunda sus planes. Se trata de los llamados “Bandidos”, el grupo que aún lucha en nombre del rey y busca recuperar la justicia de sus tierras. En el segundo acto, cuando el ejército de la Reina está por encontrar a Blanca Nieves, estos personajes se vuelven de gran ayuda para protegerla y ayudarla en su misión. Aunque no están del todo aprovechados en la película, los siete “Bandidos” funcionan como muestra de que aún hay esperanza en el reino, y gente dispuesta a desafiar el mal.
Un final completamente diferente
La cinta original termina poco después de que el Príncipe le da el esperado beso a Blanca Nieves. En cambio, el live-action sitúa este momento al final del segundo acto y construye un climax totalmente nuevo. Tras despertar, la princesa hace planes con los enanos para recuperar el reino que su madrastra ha explotado, y se dirige al castillo para hacer justicia. La villana intenta hacer que sus guardias la asesinen, pero como estos se rehusan, decide hacerlo por su propia cuenta. Es entonces que uno de los “Bandidos” interrumpe sus planes y Blanca Nieves obliga al personaje de Gal Gadot a huir. Esta se rehusa y entra al castillo, donde cuestiona a su espejo mágico quién es la más hermosa. Ante la respuesta de este (Blanca Nieves), la Reina rompe el espejo. Los cristales salen volando, pero terminan por atraparla dentro de este, que se vuelve a regenerar. Con la maldad terminada, ahora sí hay un “Y vivieron felices para siempre”.
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