El mundo ha cambiado, pero el color rosa en la tierra de Barbie prevalece. Greta Gerwig así lo ha demostrado.
El mundo no es color de rosa. A menos que seas una Barbie, claro está. La producción encabezada por Greta Gerwig siempre lo ha tenido muy claro y por eso nunca escatimó en el uso del color. Como prueba los posters y trailers que hemos visto hasta ahora, y que nos dejan muy claro lo mucho que se invirtió en esta pintura.
Todo normal hasta aquí, ¿cierto? Piensen sus respuestas dos veces, que esta decisión estética ha repercutido directamente en la industria y el mercado, ¿de la pintura? Tal como lo oyen, pues la filmación usó tantísima, ¡que provocó escasez en los Estados Unidos. Sabemos que suena a broma, pero no lo es. Así lo confesó la cineasta en entrevista con Architectural Digest.
“Mantener el carácter infantil era primordial. Quería que los rosas fueran muy brillantes y todo fuera muy excesivo. El color rosa fue central en la película”.
Así lo demuestran todos y cada uno de los vistazos a la Barbie Land revelados hasta ahora. Pero para construirla, la producción requirió cantidades estratosféricas del tono fluorescente de la pintura Rosco. Tanta, que la demanda estuvo cerca de superar la oferta, lo que provocó escasez en los Estados Unidos. O como dice la diseñadora de producción Sarah Greenwood entre risas:
“El mundo se quedó sin rosa”.
Y lo que muchos se preguntan, ¿por qué dedicar tantos recursos materiales cuando había posibilidad de construir sets y props vía CGI? Greta Gerwig lo tuvo bien claro desde el principio:
“Necesitábamos que todo fuera táctil, porque los juguetes son, sobre todo, objetos que tocas”.
Estos detalles no han pasado desapercibidos para los aficionados de Barbie alrededor del mundo, que identifican a la muñeca con el uso del color rosa. También han sido fundamentales para que Greta Gerwig dirija una película que parece destinada a generar las más complejas reflexiones en torno a la sociedad. La real, pero también la construida en el imaginario a través del juego.
Barbie es protagonizada por Margot Robbie y Ryan Gosling. Estrena el 21 de julio.