PETA cree que lo hecho por James Gunn con Rocket es fundamental para que las audiencias entiendan el maltrato animal.
Personas por el trato ético de los animales, mejor conocida por todos como PETA por sus siglas en inglés, ha entrado en conflicto con Hollywood en más de una ocasión. Esto en su continua lucha por garantizar el respeto a la vida animal en películas y series. Han sido muchos los llamados de atención hechos por la organización a lo largo de su historia, pero hoy toca celebrar una felicitación realizada a James Gunn por su trabajo en Guardianes de la Galaxia Vol. 3. ¿No la han visto? Esta noticia incluye algunos spoilers.
Desde sus primeros avances, quedó claro que la cinta se centraría en Rocket. No sólo en nuevas aventuras, sino también en la exploración de su pasado. Uno marcado por la experimentación y el dolor, el cual ya había sido descrito por el personaje en la entrega original. “¡Yo no pedí que me hicieran!”, clamó el guerrero en su momento. “¡No pedí que me despedazaran y me volvieran a armar una y otra vez y me convirtieran en un pequeño monstruo!”. Ni siquiera esta descripción nos preparó para lo visto en pantalla: una cruenta representación del maltrato animal que ha sido considerada por muchos como lo mejor del cierre de la trilogía.
Esto no ha pasado desapercibido para PETA, quien considera que lo hecho por el blockbuster marvelita es más que necesario para generar conciencia.
PETA reconoce la visibilidad que James Gunn da al maltrato animal
Así lo expresó en comunicado la vicepresidenta sénior de la entidad, Lisa Lange [vía IndieWire]:
“A través de Rocket, James Gunn le ha puesto una cara, un nombre y una personalidad a los millones de animales vulnerables que pasan por los laboratorios mientras hablamos. PETA está celebrando esto como la mejor película sobre los derechos de los animales del año por ayudar al público a ver a los animales como individuos y sugerir que el hecho de que podamos experimentar con ellos no significa que debamos hacerlo”.
Las alabanzas no terminaron aquí. Todo lo contrario, apenas empezaban. Esto al recordar que Rocket no fue la única víctima de la experimentación. Ojo, que aquí viene un SPOILER.
“Al igual que los amigos de Rocket, Lylla, Teefs y Floor, la mayoría de los animales utilizados en los laboratorios mueren después de soportar toda una vida de sufrimiento. Son recluidos en jaulas estrechas, a menudo solos y mutilados, infectados con enfermedades, criados a propósito para sufrir condiciones debilitantes, obligados a soportar múltiples procedimientos dolorosos, encerrados en dispositivos de sujeción, bombardeados con estímulos durante períodos prolongados y con frecuencia se les niega una alimentación adecuada, agua y alivio del dolor. Y a pesar de que los Institutos Nacionales de Salud gastan casi $20 mil millones por año en fondos de los contribuyentes en pruebas con animales, los estudios han demostrado que el 95% de todos los medicamentos nuevos que prueban ser seguros y efectivos en animales fallan en los ensayos clínicos en humanos porque no funcionan o son peligrosos”.
Estadísticas duras que siempre han estado ahí, pero a las que no siempre prestamos la atención debida. Con un poco de suerte, lo visto en Guardianes de la Galaxia Vol. 3 ayudará a cambiar esta situación para dar un mundo mejor para todos. Sí, eso incluye todos los animales.
¿Quieren sumarse al mensaje? No dejen de ver Guardianes de la Galaxia Vol. 3 que marca el adiós del equipo cósmico como lo conocemos. Ya en salas Cinépolis.