El estudio podría tener entre manos una de las películas más conmovedoras del año.
Luego de importantes éxitos y franquicias ya conocidas, DreamWorks promete revolucionar el cine animado con Robot salvaje, una de sus apuestas más importantes en años. Esta película no sólo se basa en una aclamada novela, también representa una oportunidad para hablar de temas importantes y presentar a la audiencia una calidad que no se ha visto en años. A pocos días de su esperado estreno, que cuenta con Garantía Cinépolis, los responsables de la cinta revelan todo aquello que hizo de esta producción un enorme reto.
A cargo de Robot salvaje podemos encontrar a Chris Sander, veterano del cine animado, y quien participó en títulos como Lilo & Stitch, Cómo entrenar a tu dragón, y Los Croods (en todas como director). Cuando DreamWorks Animation lo contrató para adaptar el libro original (también es guionista), supo de inmediato que la película requería una propuesta visual única. Se reunió con Raymond Zibach, diseñador de producción, e inició un emocionante proceso.
“Estaba tan enamorado de la soltura y la vibra impresionista de estas pinturas exploratorias (que sirvieron como artes conceptuales), y me acerqué a Raymond. Le pregunté: ‘¿Qué tan cerca de esto puede verse la película final? ¿Podría ser indiscernible de estos bocetos?’”.
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En Robot salvaje conocemos a Roz, un robot cuyo transporte se enfrenta a un problema y se estrella contra la costa de una isla boscosa. Ahí conocerá una impresionante faceta de la vida, la naturaleza, e incluso será la “madre” de un ganso huérfano. Es una historia que, más allá de transmitir un mensaje, busca conmover, revolver tantas fibras como sea posible. Roz intenta, por todos los medios, adaptarse al nuevo entorno, pero pronto surgen nuevas amenazas que la llevarán a límites desconocidos para ella.
Aunque se trata de una historia compleja, Sanders considera que tiene todos los elementos para ser digerible y lograr su cometido con la audiencia.
“Esta película tenía un arco más simple que pensé que sería perfecto para el tipo de empatía que sentí cuando lo leí. [Los personajes] existen más en una zona gris. En realidad, no son héroes ni villanos. Son personajes en situaciones difíciles en las que necesitan crecer y cambiar para triunfar dondequiera que estén”.
En aras de construir un largometraje diferente, y de sacarle el mejor provecho a la novela en que se basa, Sanders afirma que DreamWorks fue de gran ayuda. Desde hace unos años, el estudio ha realizado propuestas fuera de la animación tradicional. Se ha enfocado en otro tipo de estilo, uno más realista. Proyectos como Los tipos malos y Gato con botas: El último deseo, han recibido buenas críticas por verse “diferentes”. Al mismo tiempo, ofrecieron una gran historia. Esto encajó perfecto en los planes.
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“Para mí, era necesario que tuviéramos una apariencia sofisticada porque la naturaleza de la historia (un robot en la naturaleza entre animales) podría verse como demasiado joven, y no es una historia joven”, dice. “Visualmente, es fundamental que la gente vea esto y comprenda instantáneamente que se trata de algo diferente. Que DreamWorks ha hecho algo diferente”, agregó.
Con una historia poderosa, un reparto de primer nivel que se preparó arduamente para sus personajes, y un estilo único, Robot salvaje tiene todo para convertirse en un nuevo clásico del cine animado. Gracias a su mezcla de trabajo artesanal y nuevas tecnologías, su director la ve como un círculo perfecto de la animación. “Creo que reconectamos con algo con lo que perdimos nuestra conexión hace algunos años. Y creo que Robot salvaje no tiene otra cosa, sólo fortalezas”.
La película llegará a las salas de Cinépolis este 26 de septiembre.
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