Uno de los musicales más alabados, La La Land, cinta memorable sobre la vida en Hollywood y los amores que se terminan, cumple siete años.
Laureada con seis Óscar y otros 241 premios, La La Land fue una de las películas más comentadas durante el año 2017. Este 6 de diciembre, el tercer largometraje de Damien Chazelle, cumple siete años de haber tenido su premiere en California. Por lo que queremos hacer un pequeño recuento de los detalles que la hicieron inolvidable.
La música original de Justin Hurwitz
A lo largo de su trayectoria, el cineasta Damien Chazelle ha contado con un colaborador constante: el productor Justin Hurwitz. En La La Land, la música es definitivamente uno de los aspectos más memorables. Todas las canciones de la película fueron compuestas y orquestadas por él. La canción “City of Stars” fue acreedora al Óscar por Mejor Banda Sonora Cinematográfica.
Es un retrato de lo desolador que puede ser Hollywood
Los protagonistas de La La Land, Ryan Gosling (Sebastian) y Emma Stone (Mia), son un músico y una actriz, respectivamente, que sueñan con alcanzar un sueño de grandeza en Hollywood. A lo largo de la cinta se desmenuzan momentos amargos, solitarios y dolorosos que ambos tienen que atravesar. Desde las frustrantes audiciones hasta las tocadas en restaurantes, se hace evidente que, aunque parezca todo lo contrario, Hollywood puede ser un sitio muy desmoralizador.
La escena musical más bella de La La Land: en el atardecer en Hollywood Hills
El inicio de la relación entre Mia y Sebastian se da con el número musical de “A Lovely Night”. Para grabar esta escena con pasos de tap, el equipo sólo tenía 30 minutos para lograrlo (justamente entre las 7:20 y las 7:50 pm) para poder grabar con el atardecer de Hollywood Hills de fondo sin necesidad de usar pantalla verde. Un momento inolvidable donde los tonos lila, naranja y azul del cielo se conjugan con armonía con el vestido amarillo de Mia.
La química entre Emma Stone y Ryan Gosling
Los protagonista (Stone y Gosling) ya habían interpretado a una pareja improbable en otra ocasión (en Loco y estúpido amor (de Glenn Ficarra y John Requa). En esta película llevaron la química entre ellos a otro nivel. Su talento en las escenas musicales, su complicidad en los momentos de aventura y comedia, pero sobre todo la manera en que representaron un amor que, aunque fue inolvidable, no estaba destinado a prosperar, hace que La La Land sea icónica.
Esa secuencia clímax sin diálogos, sólo emociones
Una de las secuencias finales de La La Land, sin intención de spoilear la trama, presenta un cierre a la relación entre Mia y Sebastian. Al tiempo que otorga un recorrido por clásicos del cine de Hollywood. Con referencias a La melodía de Broadway de 1940 (Norman Taurog), La cenicienta en París (Stanley Donen) y Los paraguas de Cherburgo (Jacques Demy), los ocho minutos de baile con una colorida puesta en escena son una conclusión agridulce y maravillosa para esta historia.
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