Una de las tantas cosas que brillan en Resistencia, de Gareth Edwards, es la actuación de la debutante Madeleine Yuna Voyles como Alphie.
Resistencia, el nuevo thriller de acción que llegó hace algunos días a Cinépolis, se centra en Joshua (John David Washington). Él es un ex agente de las fuerzas especiales que se embarca en una misión de Occidente: hallar y destruir el arma más peligrosa de la Inteligencia Artificial (IA) que amenaza con destruir por completo al planeta. La misión en Resistencia se complica, sin embargo, cuando el arma resulta ser una niña llamada Alphie (Madeleine Yuna Voyles).
Así, la premisa de la película prepara el terreno para un vínculo tan complejo como conmovedor que brilla en pantalla de la mano de Washington y la debutante actriz Madeleine Yuna Voyles. Al mismo tiempo, abre poderosos interrogantes acerca de nuestra relación con lo desconocido, la tecnología y nuestros propios deseos.
Nace una estrella
Para el equipo detrás del film, liderado por el realizador Gareth Edwards (Rogue One: Una historia de Star Wars), hallar a la actriz ideal para dar vida a Alphie fue uno de los procesos más desafiantes. Afortunadamente, pero la respuesta llegó de la mano de Madeleine. Esto dijo Edwards en un comunicado:
“Teníamos cintas de cientos de niños y niñas de todas partes del mundo. La primera audición que hicimos fue la de Maddie, y estuvo fabulosa. Me dieron ganas de llorar. Cuando salió de la sala, sólo miré a mi asistente y ambos dijimos: ‘Es ella’”.
El rodaje de Resistencia tuvo lugar en 80 locaciones en ocho países diferentes, incluyendo Tailandia, Vietnam, Camboya, Nepal, Japón e Indonesia. Las jornadas de filmación fueron intensas, muchas veces marcadas por entornos duros, un calor abrasador y horas de viaje entre un destino y otro.
Conexión dentro y fuera de la pantalla
Durante el rodaje, el vínculo entre Joshua y Alphie no solo dio frutos en pantalla, sino que además se extendió fuera de cámara. Edwards, director, escritor y productor del filme recuerda cómo Washington entró en el círculo de confianza de Maddie. El cineasta añade:
“Eran inseparables. Adonde iba a sentarse John David en el set, Maddie iba a sentarse a su lado. Adoraba a JD y fue tan bueno para la película que ambos establecieran ese vínculo”.
La relación entre Joshua y Alphie en Resistencia representa un viaje emocional único para el protagonista que pone en jaque sus creencias y convicciones. Y a su vez, visibiliza a través de este vínculo la relación que los humanos tienen con la IA, en un escenario de enfrentamiento extremo entre ambos bandos. Así lo resume Edwards:
“Vivimos en un mundo en el que le tenemos miedo a la otra persona, a quienes son diferentes a nosotros. Quería intentar explorar una situación en la cual alguien que tiene un enorme prejuicio hacia un determinado grupo de personas, de pronto se viera inmerso en medio de ese grupo, forzado a vivir con ellos”
“Mientras que la película plantea muchas preguntas acerca de la tecnología y de la IA, en esencia, Resistencia es también un cuento de hadas. Una renuente figura paterna debe ayudar a una niña a atravesar bosques metafóricos mientras busca a su mujer. Lo que él quiere es recuperar a su amada esposa. Pero lo que realmente necesita es amar a esta niña”.