El desenlace perfecto para una historia sombría. Entérate aquí de lo que sucede.
¡Te contamos lo que pasa al final de Destino final: Lazos de sangre! Esta nueva entrega de la saga de horror, que llega pronto a Cinépolis, dejará impactados a los fans con su conclusión y la forma en que juega con sus personajes.
NOTA: Vienen SPOILERS de Destino final: Lazos de sangre
El pasado no perdona
Todo comienza varias décadas atrás, en 1968, cuando Iris Campbell (Brec Bassinger) tiene una premonición en la recién abierta torre/restaurante Sky View. Su visión le permite salvar a varias personas, pero sin saberlo, altera los planes de la Muerte, condenando a los sobrevivientes y sus descendientes. Este evento desencadena una serie de decesos sangrientos y horripilantes (como es común en la franquicia).
Ya en el presente, la protagonista, Stefani Reyes (Kaitlyn Santa Juana), nieta de Iris, regresa a su casa atormentada por sueños sobre el colapso de la torre. Sus investigaciones la llevan a descubrir que su abuela dedicó su vida a rastrear los patrones de muerte, buscando una manera de romper el ciclo.
El comienzo del macabro plan
Para llegar al final de Destino final: Lazos de sangre es necesario mencionar que, obviamente, la Parca hace de las suyas a lo largo del metraje. Poco a poco, Stefani va desentrañando el plan y se da cuenta de que lo que está sucediendo es que los miembros de su familia están perdiendo la vida siguiendo un orden.
Así, los Campbell buscan al icónico William Bludworth (Tony Todd), quien les explica que sólo hay dos maneras de engañar al destino: tomar la vida de otra persona o morir y regresar (tal y como sucedió con Kimberly Corman en la segunda entrega).
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Haciendo lo posible por cambiar las reglas
Con esta nueva información, y ansioso por lograr una ventaja sobre la Muerte, Erik (Richard Harmon) llega a la conclusión de que puede matar y resucitar a Bobby (Owen Patrick Joyner), su hermano más joven y el siguiente en la cadena, para triunfar. Sin embargo, nada sale como debía y ambos pierden la vida de manera brutal.
Seguido de esto, Stefani, su hermano Charlie (Teo Briones) y su madre Darlene (Rya Kihlstedt), hacen un pacto para huir a la cabaña de Iris, pues piensan que ahí estarán más seguros, ya que ella la adaptó para protegerse de la Muerte. Sin embargo, cuando llegan, su casa rodante se estrella y la cabaña explota. Darlene muere de forma brutal cuando un poste cae sobre ella, dejando a Charlie en una desesperada carrera contra el tiempo para salvar a su hermana, quien quedó atrapada dentro del vehículo, con el cinturón de seguridad atorado.
Otro problema es que la camioneta empieza a hundirse mientras se crea una inundación, por lo que Stefani empieza a ahogarse. Pronto, Charlie consigue revivirla en el último segundo gracias a una maniobra de primeros auxilios.
Todo está… ¿Bien?
Pasado cierto tiempo, mientras los hermanos se preparan para la ceremonia de graduación de Charlie, ambos celebran su aparente victoria, aunque, de repente, Stefani se da cuenta de algo terrible: en realidad, nunca estuvo muerta, sólo inconsciente. Por lo tanto, no rompieron el ciclo y la muerte sigue detrás de ellos. Justo cuando los jóvenes están reaccionando a este frustrante hecho, un tren se descarrila, lanzando unos enormes troncos que caen sobre ellos, quitándoles la vida al instante y sellando su destino.
Con esto, queda claro que nadie puede escapar.
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