Jennifer Lawrence se suma al debate en torno a los actores que recurren al siempre polémico método para sus actuaciones.
El debate en torno a la actuación del método parecía estar cerca de cerrarse. Sin embargo, Jennifer Lawrence ha aprovechado su retorno en Hazme el favor para reabrirlo. ¿Qué opina al respecto?
Antes de ahondar en el tema, vale la pena recordar que la ganadora del Óscar nunca ha recurrido a esta técnica para su trabajo. Algo que para nada le ha impedido afianzarse entre las mejores actrices de su generación. Esto para nada implica que se oponga a este tipo de interpretación, es sólo que la situación la pone un poco nerviosa. Así lo confesó a Variety:
“Estaría nerviosa por trabajar con alguien que es del método. No tendría idea de cómo hablar con ellos. ¿Tengo que estar en el personaje? Eso me pondría nerviosa. No he visto otro proceso [de actuación] sobre el que haya tenido curiosidad. No sabes de ellos todo el tiempo”.
En vez de estas estrategias tan polémicas para unos y celebradas por otros, Jennifer Lawrence se decanta por la técnica que aprendió de Christian Bale durante la filmación de Escándalo americano.
“Noté que cuando la cámara comienza a rodar y el equipo empieza a prepararse, como diez segundos antes de la acción, él comenzaba a prepararse. Vi eso y pensé: ‘Eso parece una muy buena idea’. Así que comencé a hacer eso”.
¿Buena o mala decisión? Juzguen por ustedes mismos, pues algunas de las películas rodadas desde esta vía son X-Men: Días del futuro pasado, las dos últimas entregas de Los juegos del hambre y ¡Madre!, entre otras.
Y ustedes, ¿de qué lado están? Actores como Mads Mikkelsen, Will Poulter, Brian Cox y Robert Pattinson se han manifestado en contra, alegando que sólo es una excusa para justificar una conducta indeseable. Andrew Garfield lo ha defendido, mientras que Joaquin Phoenix y Daniel Day-Lewis ni siquiera se han molestado en formar parte de la discusión.
En cualquiera de los casos, la discusión parece destinada a permanecer en un punto muerto. Se trata, después de todo, de una interpretación completa, desgastante y muy polémica, pero también una efectiva que ha dejado algunos de los mejores trabajos en toda la historia del cine.