La película llegó al FICM como una propuesta a la contracultura en México y el renacimiento de la música punk.
El cine de protesta, contestatario e independiente aterrizó en la 22° edición del Festival Internacional de Cine de Morelia con Violentas mariposas, la película de Alfonso Dávila, que narra la historia de dos jóvenes que buscan rebelarse ante las injusticias impuestas por la sociedad.
“Para mí era muy importante hablar del tema de la injusticia en México y otros tantos que no dejaban de aparecer en el país y que estaban relacionados con la realidad que vemos en la cinta”, comentó su realizador, que con su ópera prima aborda los daños generados por la violencia en México.
“Es algo que me parecía urgente retratarlo y mostrar cómo nosotros como sociedad hemos normalizado la injusticia y nos hemos acostumbrado a que así es nuestro país”.
Añadió que Violentas mariposas narra la historia de dos chicos que no están contentos con esa realidad y tratan de rebelarse con las herramientas que tienen a su alcance: la música y el graffiti.
Diana Laura Di, quien fue seleccionada para el rol protagónico como líder de una banda de punk por sus antecedentes como cantante y músico, aseguró que esa experiencia fue fundamental para emprender esta experiencia como actriz.
“Estar en un escenario con una guitarra y un micrófono te protege y te da un fundamento para no sentirte desnuda ante la cámara. Esta película me regaló mucha fortaleza”, expresó la cantante originaria de Tijuana, Baja California Norte.
Alejandro Porter, quien para interpretar su personaje de Viktor tuvo que aprender a grafitear, aseguró que el proceso de creación y rodaje fue muy divertido, mientras que Germán Bracco, consideró que Violentas mariposas es una película necesaria en estos tiempos.
“Contar esta historia desde una perspectiva jóven, con personajes revulsivos y en donde hay espacio para la protesta, es algo muy importante para mí y para el cine mexicano”.
“Que la música en esta película sea un factor tan importante, remarca el poder que tiene el punk y que ha tenido durante muchos años, pero que se ha tratado de relegar por estar en contra desde el sistema”, precisó Bracco, quien da vida a Mateo, el exnovio de la protagonista.
“Tener una película como esta, que remarque la importancia de lo que está sucediendo, que regrese el sentimiento de protesta y que le dé voz a los jóvenes, es algo muy importante para México”.
La productora Gabriela Gavica celebró el valor del director Adolfo Dávila para hablar de temas sociales tan importantes y agradeció que en nuestro país se pueda hacer cine independiente como éste.
Violentas mariposas es una producción independiente que se hizo con muchísimo esfuerzo, aplicando a fondo del IMCINE y con el apoyo de muchos contribuyentes. “¡Que viva el cine independiente!”, pronunció la socia de la casa productora Mandarina Cine.
En la conferencia de prensa de la cinta también participaron las actrices Fernanda Nibau, Norma Pablo, Ishbel Bautista y el músico Martin Thulin, quien estuvo a cargo del score del largometraje que cuenta con una poderosa fotografía de Federico Barbabosa.
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