Quiero bailar con alguien: La historia de Whitney Houston, la esperada biopic de la cantante de “I Will Always Love You”, finalmente llega a salas de México.
Siempre que estrena una película biográfica de una personaje real, ya sea de la realeza, la literatura, la música o el cine, el público tiende a dividirse entre los más férreos defensores de la fidelidad histórica con la que son tratadas estas cintas, y aquellos que sólo van a ver a su artista favorito cobrar vida en pantalla. Sin tomar ninguna de estas dos posturas, pero conscientes de que las biopics nos están inundando cada vez más, es que te invitamos a ver en nuestras salas Quiero bailar con alguien: La historia de Whitney Houston, que estrena este 26 de enero a nivel nacional.
En esta película, la actriz Naomi Ackie (Star Wars: Episodio IX – El ascenso de Skywalker) interpreta a la legendaria cantante ganadora de seis premios Grammy, Whitney Houston, en un emotivo relato del ascenso al estrellato de una de las mujeres más exitosas de la historia.
Está escrita por Anthony McCarten, el mismo de Bohemian Rhapsody, lo que ya nos da una idea de lo que podemos esperar en cuanto a anécdotas tortuosas, momentos de genialidad y muchas escenas musicales que te enchinarán la piel.
La directora Kasi Lemmons solicitó la ayuda del patrimonio de Houston para hacer el filme, involucrando a su antiguo colaborador y mánager, Clive Davis (interpretado por Stanley Tucci), y a la cuñada de la cantante, Pat Houston, para producir el proyecto, con el fin de contar su historia con honestidad y respeto.
“Hubo momentos en los que veíamos a Whitney reflejada en el espejo de manera interesante, era casi como una visita de otro mundo”, dijo Lemmons a IndieWire. “Fue muy hermoso y un poco espeluznante de una manera maravillosa. Fue como si Whitney nos hubiera visitado, y creo que hay momentos a lo largo de la película en los que Naomi realmente la canaliza y realmente da en el clavo”.
Con todo esto, parece que Quiero bailar con alguien: La historia de Whitney Houston lo tiene todo para conquistar al público. Y como buenos fans, sólo pedimos que la película incluya estas tres simples cosas. Si lo consigue, ya estamos del otro lado.
¡Chismecitos!
Desde sus pininos como parte del coro infantil, hasta su gran oportunidad de trabajar con el legendario productor Clive Davis, pasando por los momentos más tumultuosos de su carrera, como su deterioro debido a las drogas y su matrimonio en declive con el rapero Bobby Brown, la historia de Whitney Houston tiene mucha tela de dónde cortar. ¡Parece telenovela!
Un aspecto que ha dado mucho de qué hablar, es que la cinta aborda la relación entre la cantante y su mejor amiga, Robyn (Nafessa Williams), con quien aparentemente tuvo un amorío durante muchos años, el cual estuvo escondido del ojo público, pero que a la larga sería unos de los elementos más estables de Houston.
“No importa lo que haya sido, no importa quién estaba con quién, todavía se amaban y se mantenían leales la una a la otra. Eso es lo que es importante para mí, la base de la amistad en esta película, eso es lo que quiero que la gente se lleve cuando vean su relación, romance o no”, señaló Williams en una entrevista con Variety. “Eran verdaderas amigos, y no siempre tenemos la suerte de tener amigas de esa magnitud, que nos protegerán hasta el final y, ya sabes, nos acompañarán en cada paso del camino”.
Una actuación memorable
Naomi Ackie le da crédito a los entrenadores de dialecto Tangela Large, Bridgette Jackson y Denise Woods por ayudarla a sumergirse en la voz tan particular de Whitney Houston, pues para ella, este aspecto fue el más importante durante la producción para que la película fuera exitosa.
Y es que además de imitar las técnicas de canto e interpretación de Houston, Ackie también tuvo que sostener todo el tiempo un acento estadounidense, suprimiendo su inglés británico. A esto se suma el estudio de manierismos, la práctica de coreografías e incontables horas de escuchar audios inéditos de la intérprete.
“Crecí con Whitney. Ella ha sido parte de mi vida durante mucho tiempo”, dijo Ackie. “Pero la verdad es que sabía muy poco. Comencé a conocerla más íntimamente cuando escuche todas esas cintas, entrevistas, demos. Pero al final me detuve, y preferí que me hablara ella directamente. Encontrar mi propio camino y dejarme fluir, que ella surgiera de mí”.
¡Sus mejores éxitos!
Al igual que pasó con Rami Malek en Bohemian Rhapsody, Ackie no usa su propia voz durante las escenas musicales. Sí, en algunos momentos escucharás su voz, pero en su mayoría, la actriz interpreta las canciones usando las grabaciones originales de Whitney Houston, especialmente para los grandes números. “Puedo mantener una melodía, pero no soy cantante”, dijo Ackie en notas de la producción.
Sin embargo, Stanley Tucci, quien interpreta al productor discográfico de Houston, Clive Davis, elogió la imitación de Ackie de los procesos vocales de la intérprete, y aseguró que estos realmente hacen que uno se emocione y sienta como si la verdadera Houston reencarnara en pantalla.
“Cuando está recreando las canciones y cuando sincroniza los labios con estas, lo hizo de una manera tan brillante, sin esfuerzo, tan exacta, que me quedé completamente impresionado”, recuerda el actor. “Porque nadie puede cantar como Whitney Houston, que es el punto de la película”.
La banda sonora consta de 35 pistas, entre las que destacan rolitas como “I Wanna Dance with Somebody (Who Loves Me)”, “Higher Love”, “I’m Every Woman”, “Home, “So Emotional”, “You Give Good Love”, “I’m Your Baby Tonight”, “My Love is Your Love” y “I Will Always Love You”. Así que, ¡a bailar!
