Bardo ha recibido críticas mixtas que por un lado la describen como un gran logro narrativo, y por otro lado la colocan como la peor en la carrera del director.
La semana pasada se estrenó en el Festival de Cine de Venecia, Bardo, la nueva película de Alejandro G. Iñárritu que marcó su regreso a filmar en México después de casi 20 años desde Amores perros. La cinta recibió críticas mixtas pero la mayoría se referían a ella como pretensiosa, grandilocuente y sobre todo aburrida.
Hay cineastas que tratan de evitar comentar sobre la recepción negativa de sus películas y simplemente dejan que el público y los críticos hablen. Pero ése no es el caso del realizador mexicano, quien en una entrevista con Vanity Fair abordó el tema.
“Para ser honesto, no he leído ni una sola reseña completa. Obviamente, el equipo me ha estado dando algunas notas, y sé que se ha malinterpretado en muchos niveles. Respeto la opinión de cualquiera. Creo que todo el mundo tiene un corazón y todo el mundo tiene una mente y pueden sacar sus propias conclusiones. Según tengo entendido, una de las cosas que la gente dijo es que es autoindulgente o narcisista.
Creo que tengo el derecho como escritor y cineasta a tener acceso a mi bagaje emocional. Creo que ésa es la mejor fuente que puedo aportar a una película, y especialmente a ésta”.
Es una pena que la gente lo haya malentendido, y eso puede impregnar toda la percepción. Siento que, cinematográficamente, sé lo que he logrado. Espero que la gente se tome el tiempo para tratar de entender de dónde viene esta película”.
BARDO, Falsa crónica de unas cuantas verdades presenta la historia de Silverio, un renombrado periodista y documentalista mexicano que vive en Los Ángeles, quien, después de recibir un prestigioso premio internacional, se ve obligado a regresar a su país de origen a enfrentar sus demonios internos. La película es protagonizada por Daniel Giménez Cacho, Griselda Siciliani, Ximena Lamadrid e Iker Solano y llegará a cines selectos en México el 27 de octubre.
¿Se trata de la última película de Alejandro G. Iñárritu? El director también respondió esta pregunta durante la entrevista con Vanity Fair:
“No tengo hambre ahora. Tuve una comida completa y estoy desesperado por vivir la vida. Disfruto sentir mi vida y experimentarla con mi familia, que es lo mejor. De hecho, no sé si haré otra película, para ser honesto. No lo sé. Realmente no lo sé. Tiene que ser algo que realmente, realmente haga sentido. Y no sé cuándo sucederá eso”.