Hasta la fecha, su participación en este proyecto todavía lo atormenta.
En la actualidad y tras varias películas en su haber, Arnold Schwarzenegger es conocido como uno de los grandes héroes del cine de acción. Títulos como Depredador o Terminator convencieron a la audiencia de que lo suyo, lo suyo, eran las coreografías de pelea y los balazos. Sin embargo, hacer sus pininos en el séptimo arte fue, cuando menos, caótico. Hace varias décadas, Arnold Schwarzenegger participó en Hércules en Nueva York, y su debut fue terrible hasta para los creadores del proyecto.
La película mostraba a Hércules, hijo de Zeus, en su descenso del Olimpo a la Tierra. Tras terminar en Manhattan, se convierte en luchador profesional mientras entiende su lugar en el mundo. Uno de los aspectos que más llamó la atención en aquel momento fue el acento de Arnold. Todos los que lo hemos oído hablar lo reconocemos al escucharlo, sin embargo, en aquel entonces no estaban acostumbrados a él.
Desde el rodaje se hizo evidente que la actuación de Arnold no era lo esperado. Resultaba demasiado rígida, sin matices, y peor aún, con una modulación de voz que no permitía un entendimiento de los diálogos. La producción tomó la decisión de doblar sus diálogos para que, cuando la cinta llegara a los cines, los espectadores pudieran escuchar adecuadamente los diálogos.
Básicamente, el primer protagónico de Arnold no tuvo su voz, pero sí su cuerpo, y muy malas críticas. Fue considerada una película decepcionante, principalmente, por la actuación de su estrella, pero hoy también se le reconoce como un título de culto.
En 2017, Business Insider pudo hablar con el actor. El medio le preguntó cual de sus películas vería otra vez en un día común, y contrario a lo que cualquiera podría pensar, no le dio la espalda a esta cinta.
“Te lo diré, recuerdo que cuando mis hijos empezaron a entender que yo estaba en películas, y cuando aparecía en la televisión, me decían: ´¡Papá, este eres tú!´. Veía la escena, me detenía, y simplemente la miraba con ellos. Una escena o dos. Incluso una película como Hércules en Nueva York, de la cual siempre me burlo porque es muy caótica, mi primera película, e incluso tuvieron que doblar mi voz”.
Afortunadamente, Hércules en Nueva York no acabó con la carrera de Arnold, y aunque su actuación quizá no mejoró al nivel de un Oscar, sí alcanzó otros matices importantes. Vaya, llegó a convertirse en el héroe de acción que alguna vez imaginó. De cualquier manera, no le guarda rencor a su trabajo, lo ve como una experiencia de la que aprendió muchísimo.
“Mi nombre era Arnold Strong en la película. Fui realmente estúpido. Pero tuve que detenerme cuando mis hijos la vieron porque era muy estúpido. En una escena estoy luchando con un oso, y se notaba que el oso en Central Park no era un oso, sino un tipo con abrigo. Se hizo muy barata, con un presupuesto de $300 mil dólares. Filmamos en 1969, todo era muy barato. No la había visto en mucho tiempo, y mis hijos la pusieron, me vieron, tuve que parar para ver toda la escena sólo por lo ridículo que era”, agregó.
Si han visto la película o son fanáticos de Arnold, ¿creen que en realidad era tan mala?, ¿qué tan caótica debió ser su actuación como para que lo doblaran?
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